Alrededor del mundo, distintos miembros del crimen organizado pasaron cerca de tres años usando una app de mensajería “segura” para comunicarse: AN0M. Lo que no sabían es que esta plataforma fue creada por el FBI y el gobierno de Australia para monitorear sus movimientos, lo que culminó hoy con la detención de más de 800 personas.
AN0M tenía fama de ser una app de mensajería con la que los criminales podían evadir los intentos de la policía por romper la encriptación de sus comunicaciones. Sin embargo, las autoridades no necesitaron hacer nada de eso, pues la app había sido creada por el mismo FBI.
Y, ¿cómo consiguieron que los grupos criminales empezaran a usar AN0M? Como parte de la operación Ironside, la policía hizo circular distintos dispositivos con la app instalada. Estos no servían para nada más que para usar AN0M y solamente podían adquirirse si la persona conocía a alguien que también usara la plataforma.
De esa manera, la policía usó también la ingeniería social para convencer a miembros del crimen organizado de que AN0M era una app segura, pues otros reconocidos criminales dentro del gremio la usaban y recomendaban. Uno de ellos fue el traficante de drogas Hakan Ayik, también conocido como “el gángster de Facebook”.
Como informa BBC, de esa manera el FBI monitoreó cientos de conversaciones sobre tráfico de drogas, lavado de dinero y planes de asesinato.
En el operativo también se incautaron drogas, armas, automóviles de lujo y dinero en efectivo, además de 48 millones de dólares en distintas denominaciones y criptodivisas. La operación requirió cerca de 12,000 dispositivos que fueron repartidos entre 300 grupos del crimen organizado en más de 100 países.
