De acuerdo con el secretario de transporte de los Estados Unidos, Anthony Foxx, el hecho de que un vehículo autónomo de Google haya chocado no es una sorpresa.
Hablando con BBC durante el evento South by Southwest en Austin, Foxx comentó sobre el futuro del transporte terrestre y el reciente accidente causado por el automóvil autónomo de Google, que se estrelló contra un autobús.
“No es una sorpresa que en algún momento habría un accidente de cualquier tecnología que está en la carretera. Pero me gustaría desafiar a las personas para que también investigaran el número de accidentes que se produjeron en el mismo día y que fueron el resultado de la conducta humana”, declaró Foxx.
Actualmente, siete ciudades de Estados Unidos, Austin, Columbus, Denver, Kansas, Pittsburgh, Portland y San Francisco, están en competencia por una subvención del gobierno por 40 millones de dólares para financiar tecnologías smart city, incluyendo los coches sin conductor.
Foxx también dijo que esperaba que la tecnología autónoma no fuera perfecta, pero que podría prevenir hasta el 80% de los accidentes en los Estados Unidos. En el futuro previsible es probable que haya una mezcla de los coches sin conductores humanos y los actuales, aunque en el futuro de las generaciones posteriores podría ser diferente.
Por ahora, se espera que esta semana Chris Urmson, el director de la unidad de vehículos autónomos de Google, presente el proyecto que está desarrollando la compañía desde hace tiempo en este segmento ante el congreso de los Estados Unidos, en donde también estarán directivos de General Motors y Delphi Automotive, quienes hablarán sobre el avance tecnológico de los vehículos autónomos y los beneficios que esta industria brindará a los ciudadanos de dicho país.
Este interés del gobierno se relaciona con la participación del Estado en esta industria, no solo para promover la innovación y el consumo de estos vehículos sino también, y especialmente, para eliminar los obstáculos que no sean necesarios y que impidan su desarrollo.
Y es que varios fabricantes de automóviles y empresas tecnológicas que están en este segmento han dado a conocer recientemente su descontento con normas de seguridad que no permiten que se puedan realizar las pruebas de los automóviles.
Referencias: BBC, AndroidHeadlines, Alphr