La web es una de las formas de comunicación e información más usada, pero su capacidad envolvente puede desencadenar un mal adictivo y cambios en su comportamiento.
La mayoría de las veces cuando se piensa en adicción se hace referencia a sustancias como las drogas, el tabaco o el alcohol. Sin embargo, este siglo marcado por la tecnología ha traído consigo una serie de situaciones anómalas que podrían ser consideradas como adicciones: tal es el caso de internet.
Los expertos explican que existen conductas potencialmente adictivas incluyendo comportamientos que no se relacionan con drogas: “Cualquier conducta normal placentera es susceptible de convertirse en un comportamiento adictivo. Se podrían hacer usos anormales de una conducta en función de la intensidad, de la frecuencia y su grado de interferencia en las relaciones familiares, sociales y laborales”, explica el psicólogo Enrique Echeburúa de la Universidad de Madrid.
Los problemas de la dependencia traen consigo una serie de efectos negativos que trascienden el ámbito intrapersonal afectando a la familia del individuo así como también su vida académica, laboral y social.
A pesar de este problema, es un hecho que internet ha traído muchos beneficios en el mundo, pero cabe preguntarse el por qué para algunas personas este beneficio se ha vuelto una pesadilla.
Pero, ¿qué genera la adicción a la red? Según el psicólogo David Greenfield, del Centro de Estudios para Internet y la Asociación de Salud Psicológica, las cualidades de internet que potencian la adicción están relacionadas con la velocidad, accesibilidad e intensidad de la información a la que se tiene acceso.
Tanto el exceso en el uso de internet como la depresión son un tema contingente y pareciera que ambos están vinculados directamente. De acuerdo con investigadores de la Universidad de Missouri de Ciencia y Tecnología, el comportamiento en internet se enlaza con el estado mental. Refieren los académicos que, si se comparte una gran cantidad de archivos en línea, se cambia frecuentemente entre aplicaciones, se ven una gran cantidad de videos o se consulta el correo electrónico de una manera obsesiva, puede estar usted deprimido.
Para llegar a estas conclusiones, estudiaron a 216 estudiantes universitarios y se les pidió que llenaran cuestionarios para determinar si sufrían de depresión o ansiedad. Los resultados mostraron que las personas que intercambian una gran cantidad de archivos en línea fueron los que mostraron los rasgos más depresivos y en segundo lugar, las personas que tenían un alto uso del correo electrónico.
Claro que esto no quiere decir que todas las pesonas con conductas parecidas padezcan depresión. Lo interesante es que se puede utilizar estos datos para detectar y prevenir estados depresivos en las poblaciones o grupos con mayor riesgo de padecer algún trastorno.
Lo que parece estar claro es que existe una estrecha relación entre adicción a internet y la depresión.
Características de los adictos a internet propensos a trastornos emocionales y del comportamiento:
- En la mayoría de los casos, internet se transforma en una herramienta para suplir déficits en la personalidad de un individuo.
- Personalidad o estados emocionales que aumentan la vulnerabilidad sicológica hacia la adicción a internet.
- La primera de ellas es la falta de identidad, caracterizada por una baja autoestima, extrema introversión y un alto nivel en la búsqueda de sensaciones. A ello se suma un déficit en las relaciones interpersonales que puede manifestarse en la timidez y fobia social.
- La segunda característica es el déficit cognitivo que se refleja en fantasías descontroladas y tendencias a ser distraído.
Referencias: NY Times e Instituto Nacional de Salud Mental