Durante la inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012, la cadena de televisión estadounidense NBC decidió diferir la transmisión de la ceremonia de apertura al horario del prime time de ese país. Esta acción, por supuesto, provocó duras críticas en todo internet. Uno de los tuiteros que juzgaron severamente este hecho fue el periodista Guy Adams, corresponsal en Los Ángeles del diario británico The Independent, quien poco después vio suspendida su cuenta en la red social.
El tuit que provocó esta suspensión, decía: “The man responsible for NBC pretending the Olympics haven’t started yet is Gary Zenkel. Tell him what u think! Email: Gary.zenkel@nbcuni.com” (el hombre responsable de que la NBC pretenda que los Juegos Olímpicos no han comenzado es Gary Zenkel. ¡Díganle lo que piensan! Correo electrónico: Gary.zenkel@nbcuni.com).
Según la red social, el periodista violó las reglas de Twitter por publicar información privada de los usuarios, ¿fue ese tuit un motivo para cerrar una cuenta? Pues resulta que la NBC tiene un acuerdo estratégico con Twitter para la cobertura de los Juegos Olímpicos, ¿teoría de conspiración?
Además de sus tuits, Adams ha escrito varios artículos periodísticos en los que critica la decisión de la NBC sobre la transmisión, pues pagó millones de dólares por derechos para no aprovecharlos ni informar antes que nadie a los norteamericanos.
Para protestar por la decisión de la red social, los usuarios crearon el hashtag #NBCfail, que fue un trending topic destacado durante varios días. Al final, la cuenta de Adams fue reactivada hoy; sin embargo, quedan muchas dudas sobre cómo Twitter decide suspender a alguien.
Para intentar resolverlas, Alex Macgillivray, general counsel de Twitter, publicó un post a manera de disculpa en el blog de la red social, en el que explica algunas políticas y procedimientos de seguridad:
“Cuando nuestro equipo de confianza y seguridad recibe un reporte de un usuario que explica que su información personal identificable ha sido publicada en Twitter, investigamos el hecho y suspendemos temporalmente la cuenta para saber si viola nuestro documento de ‘Guidelines & Best Practices’. Esto tiene la intención de que la gente pueda reportar que alguien publicó información privada, pues podría resultar amenazador, intimidatorio y, en ciertas circunstancias, hasta ilegal”.
Antes de que la cuenta sea restablecida, Twitter pide al dueño dos cosas: que confirme haber entendido la política de información privada y que respetará los términos de servicio de Twitter.
Según Macgillivray, el equipo de confianza y seguridad no vigila activamente el contenido de los tuits, sino que siempre se requiere un reporte que se archiva en el formulario web de usuarios abusivos, esta queja debe ser hecha por la persona cuya información privada ha sido posteada o alguien que pueda actuar en su nombre.
Y la explicación sigue: “Hemos visto muchos comentarios sobre si una dirección de correo electrónico corporativo debería ser considerada información privada. Hay muchas personas que usan su correo laboral para una serie de asuntos personales —otros no—. Nuestro equipo de seguridad no tiene acceso al uso que los usuarios dan a su email y necesitamos una política que podamos implementar con todos nuestros usuarios en todos los casos similares.
Por eso, nos queremos disculpar por habernos equivocado. El equipo de NBC que trabaja con nosotros en los Juegos Olímpicos identificó proactivamente un tuit que violaba las reglas de Twitter e hizo un reporte con nuestro equipo de confianza y seguridad. Nuestro equipo no sabía eso y actuó como hubieran reaccionado en cualquier otro caso”.
“Este comportamiento no es aceptable y daña la confianza que los usuarios tienen en nosotros”, concluye el directivo. Entonces, ¿hubo trato preferencial hacia la NBC o no? Si un usuario común presenta una queja (o lo que sea) el plazo de respuesta no es tan corto y sí, la libertad de expresión, en este caso la de un periodista, se vio limitada. La buena noticia es que Twitter dio la cara y deslindó responsabilidades. Tienen razón, ellos no hicieron nada malo, pero, ¿por qué la queja tuvo efecto inmediato?
Referencia: Blog de Twitter, TechZed y ReadWriteWeb