En la última década se han desarrollado conceptos muy interesantes de diferentes productos, algunos más extraños que otros. Hace unos años, los diseñadores Edward Kim y Benny Cemoli publicaron el concepto de una bicicleta que mezcla tecnología híbrida y un diseño aerodinámico al estilo de aquellas que se utilizan en los triatlones.
La INgSOC, como se le conoce, sería un método de transporte eficaz y funcionaría en tres posibles modos: con batería, con batería de apoyo y en modo de carga. Hace unos tres años, Edward Kim y Benny Cemoil crearon varias de las piezas necesarias para armar la INgSOC en sí, pero hasta ahora, no han publicado ninguna foto de su producto terminado.
Sobre la construcción y funcionamiento de la bicicleta, el marco está hecho de una especie de fibra de carbono reforzada y el motor tiene una batería que le proporciona su poder; por esto, la bici no necesitaría de cadenas para andar. Además, INgSOC tiene luces traseras y delanteras y un dock para cargar dispositivos móviles a través del movimiento de los pedales.
Desde inicios de los 2000 distintos diseñadores, ingenieros y arquitectos han trabajado mucho en crear este tipo de prototipos y aún así, las bicicletas híbridas todavía no son algo común en el mercado. Aunque desde hace años INgSOC es sólo un concepto, es parte importante de la reciente tendencia a querer desarrollar bicicletas y métodos de transporte híbridos o alternativos.
INgSOC muestra cómo muchos proyectos increíblemente interesantes se han quedado “estancados”, por ponerlo de alguna forma, antes de convertirse en productos que se puedan vender en cualquier tienda. Y es cierto que con la creciente popularidad de los sistemas de crowdfunding cada vez salen a la luz más proyectos independientes, pero si queremos que haya innovación sobre los objetos tangibles, tal vez primero hay que voltear la vista hacia las ideas y conceptos recientes que no se convirtieron en una realidad, como ha sucedido con INgSOC.
Referencia: exquisite-thesis