Todo imperio tiene un amanecer y un ocaso, incluso Roma que llegó a ser uno de los imperios más poderosos mundialmente en su época, llegó al término debido a grandes errores y decisiones tomadas de forma pobre y arbitrariamente.

Todos los que hemos seguido de lejos o de cerca la compañía fundada por Steve Jobs y Steve Wozniak sabemos que los objetivos planteados en un inicio eran bastante puntuales.

Pero su objetivo principal era más o menos sencillo, querían crear computadoras personales que tuvieran un diseño exterior muy cuidado y que funcionaran a la perfección por dentro. Para esto deberían de crear su propio sistema operativo y fabricar personalmente sus equipos.

Las cosas han cambiado de forma radical para Apple de unos años para acá. La empresa se ha sobrevaluado a niveles poco creíbles y sus productos además de ser llamativos por fuera y funcionales por dentro se han convertido en un lujo casi impagable para la mayoría de la gente, incluso para sus más acérrimos seguidores.

¿Ha perdido el rumbo Apple? ¿Sigue Apple escuchando a los usuarios? Es evidente que Apple es una de las marcas más queridas por la gente, incluso cuando sus productos son poco accesibles. La compañía ha generado a través de los años una especie de burbuja la cual se ha convertido en algo muy parecido a una secta en la que cualquier producto o servicio que lanzan los fans lo adoptan sin chistar.

Está claro que Apple va dirigido a un mercado particular, de eso no cabe duda, pero cuál será el precio que tendrán que pagar en el futuro si siguen con el camino que están siguiendo actualmente. Es un hecho que la marca ha tenido muchos aciertos durante su recorrido en la innovación, sin embargo tal vez haya llegado a un punto en el que deba bajarse un poco del pedestal en el que está y se dedique a escuchar a la gente que consume sus productos.

Desde hace varios años, Apple ha decidido dejar de lado la posibilidad de que los usuarios puedan actualizar sus equipos de cómputo una vez que han pasado un par de años de haber adquirido el producto. Esta es una decisión totalmente arbitraria y sin fundamento desde el punto de vista de los consumidores. La única interpretación que vemos como usuarios es el negocio que hace Apple al no permitirte hacerlo por tu cuenta.

Otro claro (y más fresco) ejemplo se ha dado en la última presentación de sus equipos portátiles. La forma en la que hacen que el usuario tenga que adaptar a lo que la marca haga es egoísta y sumamente dictatorial. Nadie jamás ha dicho que sus dispositivos tengan mala calidad o que estén pobremente construidos, sin embargo esa actitud arrogante de decidir qué es lo que necesitan o no los usuarios es lo que hará que Apple cave su propia tumba.

Recuerdo una frase que dijo Steve Jobs en una entrevista, “La gente no sabe lo que quiere, tienes que mostrárselo”…tal vez Apple ha pecado de innovador. Lo cierto es que desde que no hay un Steve Jobs en la compañía, han ido perdiendo poco a poco el norte en la brújula que los guía.