¿A quién no le gustaría tener un espejo que a primera hora de la mañana lo saludara amablemente por decir lo menos? Michael Teeuw decidió hacer un espejo con estas características. Se le ocurrió la idea cuando fue a hacer una visita a las tiendas por encargo de su novia. Mientras miraba aquí y allá, Michael notó un espejo con un mensaje luminoso detrás del mismo. Intrigado por el efecto, Michael decidió hacer su propia versión, incluso una mucho mejor que la que vio en la tienda.
El espejo a usar es de un solo lado. En lugar de LEDs y otro espejo, Michael quería poner un monitor completo detrás del cristal. Para mantener el espejo delgado, Michael necesitaba un monitor con cables que salieran a un lado del espejo o mejor aún, directamente de la parte trasera del espejo. Halló un monitor de la empresa Iiyama. Quitó no sin nervios el gabinete de su nuevo monitor LCD y lo puso de manera tal que se acomodara perfectamente con lo que seria el producto final.
El marco del espejo contiene una serie de agujeros para permitir que el calor generado por el monitor pueda diluirse. El producto final pesa unos 6.5 kgs y requiere de cierta habilidad para poderlo montar en una pared. Con esto a la mano, había que tener una buena calidad en el despliegue de los datos. Michael usó una Raspberry Pi para manejar la pantalla. Puso la Pi en modo “portrait” e instaló Chromium en modo kiosko. De hecho, el espejo es en realidad una página web. Michael entonces usó HTML, CSS y Javascript para poner los datos de la hora, el clima, etcétera, de diferentes sitios web. La página se ve en un font Helvetica Neue. El trabajo final es muy fino, sin duda.
Referencias: