Durante los últimos meses hemos escuchado y leído mucho sobre las criptomonedas y cómo es que algunas de ellas han alcanzado valores históricos, tanto así que ahora es posible comprar un Tesla con ellas. Pero para comprender más sobre de dónde surgen es importante saber qué es minar criptomonedas.
Primero comencemos hablando sobre qué son las criptomonedas. Se trata básicamente de monedas totalmente digitales y descentralizadas, o sea que no dependen de ningún banco o institución financiera o país.
En el mundo de las criptomonedas existe mucha especulación y así como una moneda puede incrementar súbitamente su valor, como es el caso del Bitcoin, también puede perderlo, por eso invertir en alguna criptomoneda es una situación de riesgo.
El modelo en el que están las criptomonedas está diseñado para que se realicen operaciones entre pares: si ofreces un servicio, como pintar una casa o reparar un coche, la otra persona te podría pagar en criptomonedas al transferir de su wallet a la tuya.
Y estas operaciones con criptomonedas, al no estar respaldadas por bancos o gobiernos que avalen la transacción, necesitan de una operación compleja para que el intercambio se pueda llevar a cabo. A esto se le llama minar criptomonedas.
Cómo se validan las transacciones
Es muy importante dejar en claro que minar criptomonedas no significa crearlas, descubrirlas o encontrarlas. En realidad, este concepto se refiere al de validar las transacciones.
Todas las transacciones que se realizan en criptomonedas, al no ser validadas por una institución que lleve toda la información, utilizan una cadena de bloques, mejor conocida como blockchain. Esto es un registro único distribuido en varios nodos en la red y para el caso de las criptomonedas podemos pensarlo como un libro de contabilidad en donde se anotan todas las transacciones.
Cada bloque de esa cadena lleva una cantidad de transacciones y registros válidos, además de información y una vinculación al bloque anterior y al posterior dentro de la cadena por medio de hash de cada uno de los bloques, que sería como una especie identificación única.
Y si te preguntas si esto es seguro, en efecto lo es, ya que como el registro de esta cadena se encuentra en distintos nodos de la red, y cada uno de ellos tiene la información de toda la cadena, siempre está disponible dicha información y no se puede alterar, ya que esto significa modificar más de la mitad de ellos. Por lo tanto, la información de este blockchain asegura que los datos jamás se perderán.
Qué es minar criptomonedas
Pero volvamos al tema sobre qué es minar criptomonedas. Recordemos que esta cadena de bloques es como un gran libro de contabilidad, por lo tanto, se necesita a gente alrededor del mundo que cumpla la función de administradores de dicho libro, ahí es donde aparecen los mineros.
Cuando se lleva a cabo una transacción en bitcoin se genera un problema matemático en el sistema, algo así como su fuese una especie de clave. El objetivo es que alguien alrededor del mundo logre resolver este problema para entonces validar la transacción.
Para minar criptomonedas, término que surge de la idea de minar oro, es necesario contar con supercomputadoras capaces de resolver estos problemas matemáticos. Pero no es labor sencilla, pues se encuentran compitiendo contra otras computadoras alrededor del mundo. Los dueños de estas máquinas que logren solucionar los problemas se llevan una fracción de la criptomoneda que están minando. A eso se le llama minar criptomonedas. De hecho, hay personas que cuentan con varias de estas máquinas trabajando al mismo tiempo.
Pero no significa que al recibir la fracción de criptomoneda los mineros están creándolas, en realidad sólo ponen en circulación criptomonedas que estaban en reservas pero ya habían sido creadas con anterioridad.
La función de los mineros es muy importante, porque una vez que sus máquinas “minan” y logran resolver el problema de una transacción, la validan para evitar fraudes y entonces se crea uno de los bloques de registro que entrará a la cadena con la información de la transacción, pero no con la de los usuarios involucrados.
Por lo tanto, minar criptomoneda es validar una transacción por medio de un problema matemático que resuelven supercomputadoras. Éstas se encargan, tal como lo hace tu banco cuando vas a comprar algo a la tienda, de verificar que tu información sea verdadera, que tengan fondos suficientes y que exista la wallet que recibirá el pago. Una vez validado el proceso, la información entra a un bloque que ingresa a la cadena de bloques. Por su parte, el minero es recompensando con una fracción de la criptomoneda en cuestión.
Cada una de las más de 100 criptomonedas que existen tiene sus propio algoritmo para la minería, así como requisitos de hardware y software para las computadoras y la fracción que pagan a los mineros también es distinta entre cada una.