Todos hemos escuchado cuando menos alguna vez de lo peligrosos que pueden ser los «gastos hormiga» para la economía doméstica. Un café en la mañana, un entremés de medio día o un dulce al salir de la oficina, suelen ser algunos de los más comunes.
No obstante, el mundo digital ha comenzado a entrar a este juego. Y es que basta con revisar nuestros hábitos diarios. Pensemos en lo que sucede en el mundo del streaming.
Hoy en día tenemos una extensa galería de servicios disponibles que van desde plataformas musicales y de contenido multimedia hasta suscripciones en reconocidos servicios como Twitch.
Al enfocarnos en el streaming multimedia, tenemos que datos de un estudio publicado por IAB México revelaron que en México 71 por ciento de los internautas ven o descargan películas. Netflix, hasta el momento, se ubica como la plataforma líder en México.
Sin embargo, no es la única opción y con cada vez más contenidos exclusivos, nos hemos visto cuando menos tentados a contratar la mayoría de las opciones.
Lo cierto es que si contratáramos todas las plataformas disponibles en el país, el costo total a pagar mes con mes sería de mil 506 pesos.
Gastos hormiga digitales ¿cómo evitarls?
El problema no está en la suma, sino en el verdadero uso que damos a cada servicio. Ahí es donde se esconden los gastos hormiga digitales que golpean nuestro bolsillo sin que nos demos cuenta.
Las cifras no mienten. Datos entregados por The Competitive Intelligence Unit (The CIU), indican que los mexicanos gastan diariamente un promedio de 14 pesos en gastos hormiga digital, es decir, una suma superior a los 5 mil pesos anuales .
En la misma línea, la Comisión Nacional para la Protección y la Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) detalló que el riesgo más grande con los gastos hormiga digitales es que se realizan de manera periódica y puede representar una fuga de hasta el 30 por ciento del ingreso mensual de una persona.
En este sentido, compartimos tres recomendaciones para minimizar el impacto de estos gastos hormiga que pocos vemos:
¿Cuánto usas esa app?
No lo neguemos, a todos nos ha pasado. Compramos una app o suscripción por un tema de moda y una semana después de que ha pasado «el tren», nos olvidamos de ella. Verifica cuáles son en realidad aquellas apps de pagaque necesitas en tu día día y elimina aquellas que solo ocupan espacio en tu smartphone y tu cartera.
Sin adicionales
Muchos servicios online funcionan bajo esquemas freemium, en donde la mayoría de sus funciones (es decir, las más básicas) son de acceso gratuito y ofrecen la opción de pagar una cuota mensual por opciones personalizadas. Evalúa si en realidad necesitas esos extra, de lo contrario, elimina ese gasto.
No pagues algo que puedes tener gratis
Como ya lo hemos dicho, el mundo digital ofrece un sin fin de soluciones para cada necesidad. Muchas de estas respuestas son gratis. Antes de contratar una suscripción, investiga y averigua si existe una opción gratuita para lo que necesitas, sin olvidar la legalidad y accesibilidad del servicio. Esto te ayudará a evitar gastos hormiga en digital.