Quienes viven en México están acostumbrados a sostener con orgullo que en su país nació Guillermo González Camarena, ingeniero que inventó el sistema tricromático secuencial de campos que hizo posible la primera transmisión de imágenes a color en la televisión.
A propósito de que el 21 de enero se conmemora el día en que la televisión mexicana tuvo su primera transmisión a color, vale la pena recordar el esfuerzo de González Camarena y esa fecha en la que nuestro país transitó al entretenimiento cromático.
Los primeros sets de televisión que se presentaron al público en 1928 estaban basados en un sistema mecánico y fue hasta 1938 que los primeros modelos electrónicos se pusieron a la venta.
La televisión fue un avance tecnológico agigantado y con la implementación de los anuncios publicitarios en 1941 y del control remoto en 1955 quedó claro que el entretenimiento en casa debía atenderse para hacerlo más ameno y comercialmente explotable.
De acuerdo con información consultable en el Archivo General de la Nación (AGN), González Camarena construyó su primer sistema de televisión en 1932 y desde ese momento llegó a la conclusión de que las imágenes a color se verían mejor.
El ingeniero destinó años a la creación de un sistema tricromático que le diera vida a las imágenes en blanco y negro. Se allegó de piezas de aparatos descompuestos para hacer sus pruebas y no fue sino hasta 1940 que llegó a un resultado que reunía todos los requisitos para ser patentado.
Se trató de un adaptador cromoscópico para aparatos de televisión, cuyo registro de patente está resguardado en el AGN.
González Camarena consiguió la patente en Estados Unidos en 1941 y después exportó su sistema de televisión a color a Chicago, en donde recibió elogios como el mejor del mercado.
Con la economía de los mexicanos en mente y convencido de que la televisión debía ser disfrutada por todo el público, en 1963 creó el Sistema Bicolor Simplificado, lo que culminó en que el 21 de enero de ese año tuviera lugar la primera transmisión a color en la historia de la televisión nacional.
El programa elegido para debutar la tecnología de González Camarena fue Paraíso infantil y desde ese momento las familias mexicanas entraron de lleno a la experiencia cromática televisada que en otros países ya estaba presente desde la década de los 50.