Al parecer el enorme fallo que sufrió su dron Karma, la baja aceptación posterior y la dura competencia están obligando a GoPro a moverse con mayor cautela y tener que prescindir de cientos de empleados si quiere continuar en el negocio.
Según un reporte, la compañía de Nick Woodman continúa en aprietos y ha anunciado un enorme recorte de personal de entre 200 y 300 empleados. Este anuncio fue notificado mediante una carta a todos los empleados afectados, los cuales ya han comenzado a dejar su puesto desde esta semana, pero continuarán cobrando su salario por 3 quincenas más, es decir hasta el 16 de febrero.
Esta fuerte reestructuración y alineación de recursos es un acción necesaria por parte de la compañía la cual no termina por gozar de una estabilidad económica, ya que al parecer la enorme competencia provocada por marcas como DJI, Sony y Yi, tanto en el mercado de las cámaras como los drones han provocado que su recuperación se vea pasmada por la necesidad de continuar lanzando nuevos productos.
Para los que no lo recuerden, este suceso se coloca como el tercer recorte anual consecutivo, debido a que el primero se registró semanas después del incidente del Karma con un despido de 100 personas, mientras que el segundo se efectuó a principios de 2017, donde la compañía tuvo que dejar 270 personas más.
Por lo pronto, GoPro no ha comentado nada al respecto, debido a que se encuentra concentrado en sus próximas presentaciones en el CES 2018, evento donde la compañía buscará mantenerse estable ante la adversidad, así como seguir con la promoción de sus recientes productos, la Hero 6 y GoPro Fusion.