El 2022 podría ser el año en el que Google decida dar un nuevo gran impulso a su oferta de dispositivos portátiles y sin duda el rumoreado Google Pixel Watch podría ser una de sus grandes apuestas.
Desde hace algunos años, la compañía ha buscado la manera de reforzarse en esta categoría, en donde competidores como Apple llevan ventaja cantada.
Recordemos que durante 2019, Google compró una parte de Fossil, mientras que a principios del año pasado adquirió por completo a Fitbit.
Estos movimientos podrían verse materializados con el lanzamiento del Google Pixel Watch, el cual se espera sea cuando menos presentado a finales de mayo junto con el sistema operativo Wear OS 3.1.
Lo cierto es a espera de que esto suceda, las filtraciones alrededor del que sería el primer reloj inteligente de Google no paran y ahora, desde 91Mobiles, han compartido un nuevo render que deja ver a detalle, concretamente, la parte frontal del dispositivo y algunas pistas de lo que podría heredar de Fitbit
De acuerdo con esta nueva filtración, el Google Pixel Watch tendría un diseño redondo, con un cristal frontal de bordes curveados y una corona digital ubicada en el lateral derecha que se pronostica podría funcionar para navegar por la interfaz del reloj.
Google Pixel Watch y su integración con Fitbit
Otro detalle que no puede pasar desapercibido es la aparición del logotipo de Fitbit en la pantalla del reloj, lo que sin duda pone sobre la mesa la esperada integración del smartwatch con el software de salud y estad físico de esta última compañía.
Esto podría ser nada más y nada menos que una confirmación a un movimiento que se preveía desde principios del año pasado, y que tendría mucho que ver con la plataforma Fitbit Plus.
Hablamos del servicio bajo suscripción de Fitbit que permite a los usuarios hacer una medición mucho más detallada de su actividad física y estado de salud, misma que sin duda sería una gran adición en el Google Pixel Watch.
Por ahora no queda más que esperar para conocer las características oficiales de este dispositivo que abre para Google la oportunidad de competir en un terreno que ha demostrado crecer en demanda, pero al que quizás llega tarde.