En 2002, cuando aún estábamos lejos de llegar a la revolución del smartphone, hubo varias firmas que comenzaron a implementar funciones y componentes a los celulares para que fueran más una suerte de asistentes personales y no solo dispositivos para hacer llamadas telefónicas y mandar mensajes de texto.
En ese año, Ericsson y Sony Corporation sumaron fuerzas para dar pie a la joint venture¿Te acuerdas? Esto costaba el Ericsson T60 en México en 2002 con la cual llegaron al mercado equipos de leyenda como el T68i (del que puedes leer a detalle en este enlace) o el icónico Walkman W800 (del que hablamos en este otro lado), pero antes de que ese romance iniciara, Ericsson ya tenía en tiendas algunos equipos que incluso se vendieron en México, situación de la que nos acordamos a propósito de esta imagen que nos mandaron nuestros amigos de DeMemoria:
Como puedes ver, es un anuncio que fue publicado en el periódico Reforma el 15 de diciembre de 2002 y que se centra en el Ericsson T60, un equipo que se distinguió por incorporar un joystick para hacer más versátil la experiencia de usuario.
Llama la atención que el anuncio subrayó las características de organización con calendario, los mensajes escritos de dos vías (recordemos que en ese entonces aún estaban vigentes los pagers, receptores de textos cuyo envío debía triangularse con una operadora) y la marcación por voz.
Pero el aspecto más intrigante es el precio, pues la publicidad remarcaba que el equipo tenía un costo de 1,499 pesos mexicanos e incluía 300 pesos de tiempo aire.
Hablamos de que esos 1,499 pesos en 2002 implican el poder adquisitivo de 3,247 pesos en 2021 una vez que se ajustan a la inflación.
En otras palabras, se trataba de un equipo económico que por una parte cedería a lo que la joint venture entre Ericsson y Sony haría en la industria celular y por otra dejaría de ser atractivo ante las apuestas que comenzaron a incorporar cámara y funciones de reproducción musical y video.