Los asistentes virtuales, como Alexa, llegaron para facilitarnos la existencia y para hacer que movamos lo menos posible nuestros músculos con el fin de que nuestra voz sea la que indique qué queremos en qué momento.
En ese entendido, los asistentes están escuchando en todo momento. Y entonces, ¿qué hay de aquellos sonidos que salen de nuestras bocas pero que responden no a un comando, sino a un momento de sano esparcimiento sexual? ¿Qué tal si provocan que alguna función de asistencia virtual se active y que a su vez provoque que alguien más escuche lo que está sucediendo en la intimidad?
Con ese escenario en mente, el sitio web para adultos CamSoda creó un bloqueador de asistente virtual -o VAB, por sus siglas en inglés- que le ofrece a los usuarios la certeza de que nadie más escuchará esos momentos.
De acuerdo con CamSoda, hay reportes de que los sonidos que los humanos emitimos al tener sexo están entre la lista de ruidos que activan los altavoces inteligentes de Alexa, lo que abre brechas para que otras personas sepan qué está ocurriendo.
Por ello es que anunció su línea de VAB con forma de condones que la gente puede poner sobre sus dispositivos Alexa para bloquear cualquier intento de comunicación entre usuarios y asistente virtual.
“El avance de los asistentes virtuales con inteligencia artificial implica una amenaza a nuestra privacidad. Es verdad que estos dispositivos que siempre están escuchando son una gran ventaja en nuestra vida diaria, pero también lo es que estas facilidades vienen con un precio.
Cuando hablamos con estos asistentes, ¿quién está escuchando realmente? Hay mucha preocupación en torno a lo que pueda estar del otro lado de Alexa y a la posibilidad de que nuestras conversaciones sean grabadas y escuchadas. En CamSoda estamos conscientes del valor de la privacidad de nuestros usuarios y queremos que estén protegidos, sobre todo cuando tienen sexo”, dice Daryn Prker, VP de CamSoda.
Tiene forma de punta de condón, pero los materiales empleados en el VAB garantizan un nivel de reducción de ruido de 35, una cifra alta, cercana al bloqueo total de un micrófono.
Tiene un costo de 9.99 dólares y ya se puede preordenar.