Al parecer la tecnología de reconocimiento facial se encuentra en un nuevo auge y es que desde la llegada del iPhone X, es bien sabido que muchas marcas y servicios comenzarán a implementar este nuevo método de seguridad en sus equipos, con el fin de hacerle frente al Face ID de la manzana o aprovechar dicha función.
Pero en el caso particular de la cadena de establecimientos de comida rápida CaliBurger, han ideado la manera de automatizar los pedidos y saber mucho más de sus clientes frecuentes mediante un interesante quiosco, el cual contará con tecnología de reconocimiento facial a la que nombraron FACE.
Esta máquina está pensada para que tras registrar al usuario en el sistema, pueda levantar el pedido personalizado del cliente, —es decir que si al usuario le encanta la hamburguesa con 3 tipos de quesos, doble carne y sin pepinillos, dicha orden quede archivada en el sistema— para que en visitas posteriores, FACE reconozca su rostro y le brinde la posibilidad de pedir su hamburguesa favorita con un sólo toque, o bien, agregar más cosas a la comanda o modificarla totalmente, todo de manera más intuitiva y sencilla.
Además de esto, la compañía explica que uno de los puntos más importantes, por lo que será bueno que sus clientes se registren son los puntos y recompensas de lealtad, los cuales son adquiridos y registrados en la cuenta del usuario ya sea para obtener una cortesía o reducir el costo de su orden.
Desafortunadamente, la compañía no muestra más detalles sobre el funcionamiento de su nueva máquina por lo que desconocemos que sistema de escaneo es el que emplea FACE y si tiene la misma calidad que sistemas como el de Kinect y Apple. Por lo pronto, este sistema y quiosco se encuentran en fase piloto en una sucursal en Estados Unidos, donde de tener éxito y demostrar sus ventajas, podría llegar a más sucursales en otros países (como Canadá o México) en 2018.
Sin duda, la idea resulta bastante atractiva, pero habrá que estudiar muy bien las políticas de privacidad de la compañía y su nueva máquina, ya que además de nuestros datos personales, la compañía californiana obtiene una imagen bien detalla de nuestro rostro —en caso de que ocupe una tecnología similar al Kinect o Face ID—. Algo tal vez irrelevante para muchos, pero si la moneda del futuro será nuestra cara, tendremos que cuidar mucho más que o quién escanea nuestra cara.