Esencialmente, BOSS es una apuesta para que otros hagan innovaciones en las formas de buscar y compartan ganancias de los resultados. Esto es sin duda el ejemplo más significativo de la estrategia abierta de Yahoo para convertirse en una parte indispensable de Internet.
El API (Application programming interface) de BOSS es gratuita, pero BOSS exige a quienes usen su sistema que muestre anuncios en las búsquedas (algo parecido a Google Ads). Se espera que así se expanda la huella del buscador de Yahoo dentro de la web. Una idea que Yahoo ha mostrado para BOSS es desplegar imágenes miniatura de las páginas resultantes en la búsqueda, algo que curiosamente hace el buscador mexicano Simploos (lo cual sin duda no le debe hacer feliz y si Simploos quiere mantenerse como posibilidad de búsqueda en la web, tendrá que mejorar la velocidad de sus despliegues, sino estará fuera de mercado). Como sea, BOSS es una idea interesante. Yahoo espera atraer a empresarios e investigadores y de hecho, ya tiene alianzas con la Universidad de Stanford, El Instituto de Tecnología Indio en Bombay, El MIT y otros sitios educativos.
Por otra parte, ya Yahoo había lanzado su programa llamado SearchMonkey que permite a los programadores aumentar los resultados de las búsquedas de Yahoo con más riqueza en la información encontrada, por ejemplo, añadiendo una calificación o bien haciendo una revisión del sitio en cuestión. Sin embargo, en BOSS se puede alterar el orden de los resultados, filtrar un resultado particular, desplegar resultados de una variedad específica y combinar los datos que entrega Yahoo con los que el usuario quiera poner.
De acuerdo a Yahoo, iniciar un negocio de búsquedas que sea competitivo requiere de financiamiento realmente prohibitivo. Yahoo habla de alrededor de 300 millones de dólares para cubrir los gastos de nómina y del hardware que constantemente está indexando nuevas páginas Web, así como el manejo de peticiones de búsqueda.