Joker está perfilándose a convertirse en la película con clasificación para adultos más taquillera de toda la historia y está demostrando que los estudios necesitan tomar riesgos para hacer la diferencia en una arena saturada de propuestas virtualmente idénticas.
La cinta de Todd Phillips ha sido comentada hasta el cansancio por la crítica especializada y por la fanaticada del cine de cómics y, debido la manera en que deja varias aristas narrativas abiertas a la interpretación de la audiencia, las teorías han estado a la orden de día.
En ese entendido, el filme deja claro que, como consecuencia de su condición mental, Arthur Fleck / Joker tiene alucinaciones, abordadas en secuencias como aquella en la que está entre la concurrencia del show de Murray Franklin o en todo el arco amoroso con su vecina Sophie.
A partir de ello, una de las más grandes teorías en la web es que toda la película es una alucinación de Fleck, y los fanáticos han estado a la busca de elementos o guiños que confirmen o rechacen este escenario.
Al respecto, el director de fotografía de la película, Lawrence Sher, dio lo que podría tomarse como la respuesta definitiva.
En entrevista con SlashFilm, Sher habló de que la película tiene elementos que orientan al espectador a saber qué es real y qué no. No es una guía exacta, pero sí ofrece cierta luz para disfrutar la película desde otra perspectiva.
“En términos de lo que hicimos visualmente para jugar con lo que es real y con lo que no es real, pusimos escenas y guiños que se reflejan unos a otros. Dejamos pistas usando imágenes y en la manera en que similarmente cubrimos escenas entre escenas. Fuera de eso, me gusta que la gente abra conversaciones y saque sus propias conclusiones.”
Sher también despejó una de las grandes interrogantes que deja el filme de Phillips: ¿Fleck mata a su vecina Sophie?
“Todd (Phillips) deja claro que no fue asesinada. Arthur mata a la gente que de alguna u otra manera le hizo daño y Sophie nunca le hizo nada.”
Hablando de Phillips, él mismo ha sugerido que la película está sujeta a interpretación de la audiencia, pues el Joker es un narrador no confiable. También hace hincapié en que hay escenas que se reflejan a sí mismas y que ello le da pistas a la audiencia sobre qué es real.
En entrevista con Comicbook dijo:
«No quiero decir qué es real y qué no porque creo que parte de la diversión -le he enseñado la película a mucha mucha gente y todos tienen una diferente reacción […] La idea es que no te guste contestar esa pregunta, porque me agrada ver las diferentes conclusiones a las que llega la gente.
Hay ciertas cosas de las que te darás cuenta al ver la película de nuevo. Por ejemplo el cuarto blanco al final que retoma una parte del inicio. Te quedarás diciendo ‘Esperen un momento. Esto es interesante'».
Por otro lado, cabe recordar que en la web hay distintas teorías de fans acerca de lo que no es real. Una de las más aceptadas gira en torno a los relojes que aparecen en la película y que marcan las 11:11, denotando que los hechos del filme están congelados en el tiempo, pues solo tuvieron lugar en la cabeza de Fleck.
Es factible que toda la película sea un delirio del protagonista. En una secuencia al inicio, podemos verlo azotándose en una celda en donde hay un reloj que marca las 11:11 y que, atendiendo las declaraciones de Sher y Phillips sobre escenas que se replican entre sí, podría ser reflejo de la secuencia del desenlace, en donde dice que se acordó de un chiste que no se entendería.
Insistimos, hasta el momento no hay una guía exacta para determinar qué es real y qué no, pero es posible hacer un rastreo a partir de las palabras de Sher y Phillips.
Y en ese caso, la clave está en identificar qué secuencias son reflejos entre sí, lo que a su vez puede apoyarse en los relojes que aparecen a cuadro y en el hecho de que el Joker es un narrador no confiable.