Se cree que el nombre spam fue atribuido por una escena de Monty Python. En ésta, un grupo de vikingos ingiere todos sus alimentos con la carne enlatada ‘Spam’ —misma que sirvió de alimento básico para los soldados británicos en la Segunda Guerra Mundial— y con el humor ácido de la serie, la broma local trascendió a nombrar lo que hoy conocemos como el correo basura.
En la actualidad este tipo de correos son enviados con intenciones fraudulentas, publicitarias y de venta, entre otras categorías. Por ello, las empresas de seguridad informática se han encargado de crear sistemas para bloquear el acceso del spam en correos electrónicos.