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Cómo arreglar los problemas de conexión Wi-Fi que se dan en casa

No siempre es necesario llamar a los técnicos para solucionar los problemas de conectividad que se sufren por la señal de Wi-Fi en el hogar, tú mismo puedes arreglarlo.

En la actualidad, la mayoría de las personas cuenta con datos móviles en sus celulares permitiéndoles estar conectados a la red sin ningún problema, pero hay otros tantos que deben usar la conexión que les brinda el módem que está en sus hogares.

Sin embargo, de vez en cuando existen problemas con esta conexión que hacen difícil completar las tareas y obligaciones que se tienen pendientes, provocando que los usuarios tiendan a molestarse con la compañía que les brinda el servicio de Internet, y haciendo que un técnico vaya a arreglar el problema.

Estas molestias y enojos pueden evitarse, ya que uno mismo puede solucionar los problemas más comunes que se manifiestan con el uso de la red Wi-Fi, sin necesidad de acudir inmediatamente a la empresa.

Uno de los problemas más comunes que se presentan respecto a esto, es que “el Internet está muy lento”, y aunque la gente cree que esto es difícil de remediar, la realidad es totalmente diferente porque su arreglo puede consistir en que se desconecte alguno de todos los dispositivos que estén conectados para dejar fluir la red.

Si esta opción no arregla la situación, se pueden probar con las siguientes alternativas:

  1. Mover el módem y/o router

Aunque se dude de la eficacia de esta solución, la verdad es que en la mayoría de los casos funciona, porque la localización en la que el módem y/o router se encuentre influye mucho en la conectividad, ya que mientras menos objetos haya entre éste y el celular o la computadora, habrá más eficiencia y velocidad.

  1. Cambia de canal

Si se vive en un lugar donde muchas personas tienen acceso a Internet a través de diferentes redes y compañías, es probable que se afecte la señal que uno mismo está utilizando, por lo que se recomienda que se cambien los canales del WI-Fi hasta que se encuentre uno donde haya menos interferencia; para poder ver qué canal es mejor, se puede descargar la app Wifi Analyzer y basarse en esa información para hacer el cambio.

  1. Utiliza un repetidor de señal

Si la casa en la que vives, hay paredes muy gruesas o existen dos niveles, puede que tengas problemas de conectividad, así que para evitar esto, se puede instalar un repetidor de señal, el cual es un aparato pequeño que a través de su antena captura la emisión del router y le da potencia para que funcione a la perfección en cualquier lugar.

  1. Usa papel aluminio

Si por el momento no tienes dinero para comprar el repetidor o paciencia para mover el módem, puedes optar por un utensilio que todas las personas tienen en su hogar: el papel aluminio, así es, aunque esta técnica este subestimada, funciona. Para que esto sirva, sólo basta con crear unas “paredes” en la parte de atrás del router para que se modifique la dirección de las ondas y se intensifique la potencia.

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