¡Qué tiempos aquellos! Los sermones de mamá, esos forzadores de carácter que nos ayudaron a ser las bonitas personas que somos hoy. Esos entrañables regaños mezcla de cariño, furia y frases prefabricadas que se han transmitido por generaciones y que ahora se encuentran incrustadas en nuestro corazón y memoria.
Joyas como “Me vas a sacar canas verdes”, “me tienes con el Jesús en la boca” y “ahorita que lleguemos a la casa…” que nunca podremos olvidar.
Todos las escuchamos y ahora nuestros amigos de Chilango las recordaron con particular precisión a propósito de la inminente llegada del 10 de mayo. Ahora les compartimos este emotivo catálogo para que lleguen a abrazar a mamá con mas cariño que nunca.
1. La pitonisa
Mamá podía ver el futuro, es uno de sus súper poderes. De ahí que con frecuencia la escucharas decir “Mijito, eres un bueno para nada” y ahora eres diputado, youtuber, influencer o escribes artículos sobre frases de mamá. (AIÑ)
2. El apalancamiento
Mamá siempre supo dónde llegarnos, justo en nuestras ganas de divertirnos. “Cómete todo o no te dejo salir…”, está era una manifestación de poder pura y esperamos que no la hayas puesto a prueba, porque seguramente perdiste.
3. La cazadora del arca perdida
Aceptémoslo, nunca fuimos buenos para el orden y cuando nuestra casa se convertía en una especie de templo antiguo con bóvedas secretas y trampas por doquier, encontrar el sweater, o cualquier cosa, se volvía imposible. Pero para mamá todo era posible y cuando escuchabas “Y si yo lo encuentro, ¿qué te hago?”. ¡Y LO ENCONTRABA!
4. Entrenando para la cruda realidad
¿Quién diría que “Lo hago por tu bien” se convertiría en la justificación preferida del político mexicano para hacer sus fechorías? Mamá lo sabía y por eso no repitió esta frase, para estar preparados para decepciones futuras. ¡Gracias Ma’!
5. La apuesta
Todos tuvimos que huir alguna vez del certero y riguroso castigo de mamá y a veces, solo a veces, conseguíamos llegar a algún refugio que nos hacía ganar tiempo para pensar una decisión fundamental: “Abre la puerta o te irá peor”.
6. El corporativo
“Nadie te cuidará como yo” decía ella, la mejor campaña de reforzamiento de marca que se ha visto en la historia. Y es que mamá era la encargada de que confiarás en las decisiones de la compañía (familia) y alinearte con la estrategia para el futuro.
7. La “El Padrino”
Hay veces en la vida que tienes la oportunidad de hacer lo correcto, aceptar “ofertas que no se pueden rechazar”. Mamá daba esa oportunidad con frecuencia: “¿Me estás avisando o me estás pidiendo permiso?” Y a veces hasta te daba un segundo chance: “Te estoy avisando”, pero esa imprudencia que viene con la juventud nos hacía ganarnos unos buenos zapes por respondones.
8. El bueno, el malo y mamá
Cada que mamá decía: “Me voy a quitar la chancla en 3… 2… 1” se escuchaba música de vaqueros y un arbusto desértico pasaba rodando al ritmo del cascadle de una víbora. ¿Sobrevivirías a la chancla más rápida del Oeste?