La meta del Mars 2020 es muy ambiciosa, pues se busca recolectar muestras de la superficie del planeta rojo que, eventualmente en otra misión, podrían recuperarse para traerlas de vuelta a la Tierra. En el nuevo carrito robótico hay muchas herramientas que tienen que ver con el desarrollo de la tecnología laser, que permitirá iluminar incluso las característica de las piedras marcianas de forma tan fina como el ancho de un cabello humano.
Este nivel de precisión requiere un blanco de calibración para ayudar a, precisamente, poner a punto el rayo laser y para eso se pretende usar este pedazo de meteorito marciano. Dependiendo del instrumento que vaya a usarse en el carrito robótico, hay que pensar cómo calibrarlo considerando rocas, metal o cristal, los cuales tienen parámetros diferentes.
La NASA sabe que los meteoritos no son las únicas muestras que recuperará el robot Mars 2020, pero son científicamente interesantes, y perfectas -a decir de la NASA- para hacerlos blancos de prácticas. «Estamos estudiando cosas a tan fina escala que si se desalinean aunque sea muy ligeramente, consecuencia de por ejemplo, el calor o cierta temperatura, nos obligarían a recalibrar para cumplir con nuestro objetivo», dice Luther Beegle, del Jet Propulsion Lab, en Pasadena California. Beegle es el investigador principal del instrumento SHERLOC (Scanning Habitable Environments with Raman and Luminescence for Organics and Chemical). «Estudiando cómo los instrumentos ven un blanco fijo, podemos entender cómo verá un pedazo de la superficie marciana», indica el investigador.
La idea en el fondo es que todos estos instrumentos y aparatos que irán a Marte buscan preparar la aventura de poner un hombre en el planeta rojo. Las dificultades son enormes pero se espera que con instrumentos como SHERLOC, los eventuales astronautas en la superficie marciana puedan tener más oportunidades no sólo de sobrevivir, sino de montar incluso una base en dicho planeta.