Investigadores del Instituto tecnológico de Massachusetts (MIT) han desarrollado un sistema con una cámara 3D y una interfaz en braille que permite a las personas con discapacidad visual guiarse en su entorno.
Según la Organización Mundial de la Salud, 39 millones de personas en todo el mundo son invidentes y 246 millones tiene algún grado de perdida de la visión.
El prototipo, creado por el laboratorio de ciencias de la computación e inteligencia artificial de este organismo se coloca en el cuello y captura imágenes en 3D de todo lo que rodea a la persona que porta este sistema.
Posteriormente, esta información visual se convierte en una representación física, llamada como “nube de puntos”. Los puntos son agrupados para identificar superficies planas y se mide, de esta manera, la distancia al obstáculo más cercano en la dirección en la que se esté moviendo el sujeto. El usuario recibe esta información a través de una interfaz en braille.
«Había un trabajo previo en este tipo de sistema, pero el problema es que los sistemas eran muy grandes, porque requerían toneladas de procesamiento diferente», dijo Dongsuk Jeon, becario postdoctoral en el MIT.
«Queríamos miniaturizar este sistema y nos dimos cuenta que es fundamental hacer un chip muy pequeño que ahorre energía pero aun así proporcione suficiente potencia computacional».
Como resultado de esta investigación, se ha logrado desarrollar un chip que permite traducir los datos de la cámara 3D con un consumo muy bajo. Según sus responsables, estos chips consumen una milésima de energía de la que emplea un procesador convencional. Este ahorro lo han conseguido creando un nuevo algoritmo, que estudia los puntos más cercanos entre sí y obvia a acudir a la memoria principal para recuperar información (uno de los procesos más devastadores para la energía del equipo).
Actualmente el proyecto continúa abierto para reducir aún más las dimensiones del aparato y conseguir una adecuada refrigeración del sistema, teniendo en cuenta que estará en continuo contacto con la piel humana.
Cabe destacar que este trabajo cuenta con el patrocinio de la Fundación Andrea Bocelli, creada por el ciego tenor italiano, Texas Instruments, y la Universidad de la Taiwanlos quien fabrico los chips prototipos.
Referencia: MIT