Un grupo de científicos de la Universidad de Tufts en Estados Unidos, desarrolló un prototipo de vendaje que permitirá monitorear el estado de algunas heridas graves o crónicas que se hayan realizado las personas.
De igual manera, administrará los tratamientos médicos necesarios para que se aumenten las posibilidades de mejorar y de tener una curación completa.
El vendaje cuenta con capacidades inteligentes que brindarán las dosis adecuadas para cada herida sin necesidad que se realice algo más, ya que sólo basta con que se tenga encima de la respectiva lesión.
A pesar de que los vendajes no han sido utilizados en un contexto clínico, se sabe que esa es la idea con la que fueron creados, pues hará que las personas dejen de preocuparse si la herida puede infectarse o no por falta de los cuidados adecuados, por lo que no necesitarán de estar cerca de un médico para realizar el cambio de venda.
Otra de las características que tiene el parche, es que puede ser conectado a un smartphone para recibir mensajes sobre el estado de la herida y saber en qué condiciones se encuentra.
La nueva herramienta suministrará los medicamentos necesarios gracias al microprocesador que tiene, puesto que sabrá la hora adecuada para hacerlo por la información que le dé los sensores de temperatura y pH, además que se podrá rastrear donde se está desarrollando alguna infección y/o inflamación gracias a sus biomarcadores específicos.
El dispositivo completo está unido a una cinta médica transparente que forma el vendaje flexible de 3 mm de grosor aproximadamente y los componentes con los que cuenta hacen que éste sea desechable y de bajo costo.
Sameer Sonkusale, profesor de Ingeniería Eléctrica e Informática en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Tufts y co-creador de esta herramienta, mencionó que la realización del vendaje se debió al uso de la electrónica flexible, porque sin ella no podría ser posible adherirlo a la piel:
«Hemos podido aplicar un nuevo enfoque a los vendajes debido a la aparición de productos electrónicos flexibles. De hecho, la electrónica flexible ha hecho posible muchos dispositivos médicos portátiles, pero los vendajes han cambiado poco desde los comienzos de la medicina. Simplemente, estamos aplicando tecnología moderna a un arte antiguo con la esperanza de mejorar los resultados de un problema difícil de resolver».
Todavía falta tiempo para que los vendajes sean mejorados y probados en algunos hospitales para ver si son efectivos, pero a pesar de eso, el simple hecho de usar la tecnología para ayudar a los pacientes hace a los creadores estar satisfechos.