Christof Heyns, relator especial de la ONU sobre ejecuciones extrajudiciales, hizo un llamado a establecer una prohibición temporal del uso y desarrollo de máquinas o robots letales autónomos que tengan la capacidad de elegir un blanco y asesinar sin supervisión. El experto insiste que “de la misma manera que tomar la vida de cualquier humano merece como mínimo algo de deliberación, una decisión que permita el uso de máquinas para matar humanos merece una pausa colectiva a nivel mundial”.
Las fuerzas militares del mundo ya han utilizado drones letales para completar misiones y asesinatos, pero esas máquinas aún requieren de una persona que esté al mando. Muchos piensan que la evolución de los drones hacia las armas letales autónomas es inevitable y que seguramente generará una carrera armamentista de robots.
La Fuerza Aérea de Estados Unidos reporta: “aunque hoy los humanos todavía tienen más capacidades que las máquinas para muchas tareas, para 2030 las capacidades de las máquinas habrán incrementado al punto en que los humanos serán el componente más débil de una enorme gama de sistemas y procesos”.
Heyns quiere que el consejo de la ONU considere y aplique la prohibición de robots letales autónomos al menos hasta que el mundo tome conciencia de la situación y la comunidad internacional esté lista para tomar una decisión. Según dice, la introducción de estos robots autónomos podría representar una terrible amenaza para la paz y los derechos humanos; por eso pide “un compromiso serio y significativo de la comunidad internacional antes de entrar en un mundo donde a las máquinas se les de el poder de matar humanos”.
Referencia: UN Human Rights