Actualmente hemos visto como muchas partes del cuerpo son remplazadas por órganos y prótesis artificiales. Pero ahora estas partes se han conjuntado en un todo para formar el primer hombre biónico llamado Rex, con un costo de alrededor de $ 1 millón de euros. De dos metros de altura y construido a partir de la más avanzada tecnología biónica que el mundo puede ofrecer hoy en día, se está exponiendo al público del 7 de febrero hasta el 11 de marzo en el Museo de Ciencias de Londres.
Rex fue construido por Richard Walker de UK Roboticists y Matthew Godden de Shadow Robot en Londres. Ellos se encargaron de reunir todos los componentes del humanoide de dieciocho empresas y universidades en todo el mundo para crearlo.
Para iniciar el cráneo de la cabeza de Rex sigue el modelo de Bertolt Meyer, un psicólogo suizo, que tiene una mano biónica y que es el presentador del canal británico News Channel 4 que colaboro con el proyecto. Después le siguen un brazo de autoaprendizaje con 26 grados de movimiento, gafas que envían imágenes a un microchip en la retina que envía la información al cerebro computadora, sangre sintética, pulmones artificiales, una páncreas artificial con insulina almacenada en gel que se reblandece y se licúa en la presencia de exceso de glucosa, un riñón artificial con auto-regulación, compuesto de un sistema de filtración de silicio a nanoescala; además del un bazo, una vejiga, oído, implantes cocleares, una tráquea, arterias, un generador de voz, tobillos biónicos utilizando un motor y un sistema de muelles para imitar el músculo de la pantorrilla y el tendón de Aquiles, y por supuesto, un corazón alimentado por la batería.
Los órganos internos como los pulmones y la vejiga aun se encuentran en desarrollo, además de que parte de la tecnología no puede funcionar sin la intervención humana, como las manos biónicas, por ejemplo, ya que necesitan de los músculos y las señales del cerebro para funcionar. Otras partes, tales como el corazón y el páncreas, se han diseñado para trabajar por su cuenta.
De las partes faltantes importantes se encuentran el estomago y el hígado que son órganos muy grandes y complejos que necesitaría mucha energía además de un cerebro con una verdadera inteligencia artificial que actualmente no existe para conformar un todo.
Es muy poco probable que en nuestras vidas o en la de nuestros nietos, veamos a un cuerpo humano completamente articulado con una verdadera inteligencia artificial, pero esto es solo una muestra de las piezas protésicas, que seremos capaces de reemplazar en un ser humano en un futuro no muy lejano.
Referencia: 4News