Científicos de la Universidad de Harvard han demostrado que pueden regenerar un órgano humano dañado mediante células madre adultas al restaurar una córnea humana. Un avance que ofrece esperanza a miles de personas que han perdido la visión por quemaduras, infecciones, accidentes con sustancias químicas o que padecen alguna enfermedad degenerativa en los ojos.
La córnea es la capa transparente en la parte frontal del ojo que cubre el iris, la pupila y la cámara anterior, representa cerca del 65% de la capacidad de enfoque del ojo. Es extremadamente sensible pues se calcula que en la córnea hay una inervación sensitiva que es 300 veces mayor que la de la piel y 80 la del tejido dentario.
Para el crecimiento de la córnea humana los científicos usaron una molécula llamada ABCB5, que actúa como un marcador para las células madre limbares las cuales residen en el epitelio limbal basal del ojo, o limbo, y ayudan a mantener y regenerar el tejido corneal, por lo que su pérdida por una lesión o enfermedad es una de las principales causas de ceguera.
“Es el primer tejido cultivado a partir de una célula madre adulta, un hito que consigue que la medicina regenerativa aplicada a la visión sea cada vez más certera”, refieren los investigadores.
En el pasado, se han utilizado trasplantes de tejidos o células para ayudar a la regeneración de la córnea, pero no se sabía si había células madre limbares reales en los injertos, o cuántas de ellas, y los resultados no fueron consistentes. En este estudio, los investigadores lograron utilizar anticuerpos para detectar ABCB5 en las células madre en el tejido de donantes humanos fallecidos y las utilizaron para regenerar anatómicamente córneas humanas normales y totalmente funcionales en ratones.
«Las células madre del limbo son muy raras y que el trasplante tenga éxito depende de estas células. Con este hallazgo será ahora mucho más fácil restaurar la superficie de la córnea», explica Bruce Ksander, coautor principal del estudio.
Utilizando un modelo de ratón desarrollado por el laboratorio, vieron que el gen funcional ABCB5 se produce en las células madre del limbo y es necesario para su mantenimiento y supervivencia y para el desarrollo de la córnea y su reparación, de forma que los ratones que carecen del gen perdieron sus poblaciones de células madre del limbo y sus córneas se regeneraron de forma pobre tras una lesión.
“Una parte muy emocionante del estudio es que, aunque hay bastantes evidencias de que las células madre adultas contribuyen a regenerar los tejidos, lo que vemos aquí es básicamente la primera evidencia de que puedes coger células madre adultas y regenerar el órgano dañado”, afirma Natasha Frank, de la Universidad de Harvard.
Referencia: Nature