Investigadores del National Heart and Lung Institute del Imperial College London desarrollaron un nuevo análisis de sangre que podría advertir a la gente si son propensos a sufrir un ataque al corazón en los próximos cinco años.
Los científicos encontraron que los niveles elevados de anticuerpos IgG (moléculas producidas por el sistema inmune) están vinculados al riesgo de padecer problemas cardiovasculares, independientemente de otros factores de riesgo.
Hasta ahora los médicos utilizan la información como la edad, el sexo, el historial médico, los niveles de colesterol, el peso y la presión arterial para calcular el riesgo de futuros problemas cardíacos.
En el estudio se monitorearon mil 753 pacientes durante 5 años y el hallazgo fue que los pacientes con un nivel alto del anticuerpo IgG tienen menos riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular, como ataques cardíacos y apoplejías, que aquellos que tienen niveles más bajos.
Esto es incluso teniendo en cuenta factores que también influyen en estas enfermedades como por ejemplo altas presiones o altos niveles de colesterol. Demostrando así que el nivel de anticuerpos tiene un peso mayor.
Cabe destacar que el análisis puede también descartar pacientes con bajo riesgo y evitar así un desperdicio de dinero y de recursos en tratamientos que no son requeridos.
«Los métodos actuales para determinar el riesgo son bastante inexactos, esto significa que con este nuevo método más pacientes serán apropiadamente clasificados, ya sea con riesgo o no», dijo el doctor Ramzi Khamis, responsable del estudio.
Las enfermedades cardiovasculares son la principal causa de muerte en todo el mundo. Se calcula que en 2012 murieron por esta causa 17,5 millones de personas, lo cual representa un 31% de todas las muertes registradas en el mundo. De estas muertes, 7,4 millones se debieron a la cardiopatía coronaria, y 6,7 millones, a los accidentes cerebrovasculares.
La IgG es la inmunolobulina más abundante del cuerpo y se encuentra dentro de todos los fluidos corporales. Es responsable de proteger el cuerpo contra las infecciones bacterianas y virales.
Sin duda un gran avance ya que la medición de IgG es simple y barata, por lo que este hallazgo puede significar que en el futuro sea más fácil para los médicos determinar con mayor precisión el riesgo de tener un ataque al corazón.
Referencia: Imperial College London, OMS