Dicen por ahí que la humanidad, a pesar de todos los descubrimientos, sólo conoce y comprende un pequeño porcentaje de lo que realmente es el mundo. A veces andamos por ahí sin cuestionar lo que sucede a nuestro alrededor; todo lo damos por hecho y pensamos que las cosas suceden porque sí.
Un claro ejemplo que quizá te habías preguntado, pero que probablemente nunca has conocido la respuesta, es el hecho de que una lombriz siga viva aunque se parta a la mitad. Seguramente en algunos días lluviosos, has observado que este tipo de gusanos pueden romperse, pero ambas partes siguen moviéndose, ¿por qué sucede eso?
Para empezar, es importante aclarar qué es exactamente una lombriz. Se trata de un lumbrícido comúnmente denominado como lombriz de tierra; es parte de una familia de anélidos oligoquetos. El nombre de lombriz se aplica a otros invertebrados sin relación alguna con los anélidos, como las lombrices intestinales… aquellas que te salen por haber comido en cualquier puesto de la calle.
Toda especie cumple con un objetivo en su ecosistema y las lombrices de tierra son de gran importancia para el alimento animal y humano (ya sea que los gusanos estén vivos o en forma de harinas). Además, funcionan como tratamiento y valorización de residuos, transformando residuos que se desecharían e irían a vertedero en abonos para la fertilización de suelos.
La estructura de las lombrices es un tanto curiosa, pues no cuentan con una cabeza bien definida, pero sí con una boca en uno de sus extremos y un ano en el otro… aquí es cuando ya viene lo interesante. Muchos piensan que una lombriz al romperse se reproducirá, pero esto no es así. De hecho, cuando una lombriz se rompe, solamente queda viva la parte de la boca y la otra parte faltante se regenera al cabo de unos días.
La parte que tiene el ano, puede regenerarse y probablemente por eso nos de la impresión de que continúa con vida, pero sólo puede repetir un segmento exactamente igual, dejando el cuerpo invertebrado con dos rectos, imposibilitando la supervivencia.
Las lombrices poseen ambos sexos, así que ellas mismas se aparean cada 7 días, poniendo una cápsula donde pueden nacer entre 1 a 20 tras 14 días de incubación.
Las lombrices de tierra podrían aparentar un significado irrelevante, pero hay investigadores que han realizado estudios que sugieren que en este tipo de gusanos se podría encontrar el secreto de la inmortalidad. Científicos británicos de la Universidad de Nottingham proponen que las lombrices podrían conservar el secreto de la vida eterna por su habilidad de regenerarse repetidamente.
Los científicos fueron capaces de crear una colonia de más de 20 mil especímenes de lombrices de tierra a partir de una sola que cortaron en pedazos, de los cuales surgieron individuos enteros a partir de los fragmentos con la boca.
La capacidad regenerativa es una gran cualidad que no deberíamos subestimar, pues no sólo en la ficción los monstruos pueden volver a sustituir sus extremidades.