Científicos chinos han desarrollado un método simple, no quirúrgico, controlable y eficaz para la anticoncepción masculina. A través del efecto fototérmico en nanopartículas de oro que serán inyectadas en los testículos que mataran a los espermatozoides, logrando una infertilidad temporal.
Durante las últimas cinco décadas, la carga de asegurar el sexo sin embarazo se ha basado en gran medida en las mujeres, ya sea a través de métodos como la alteración hormonal por medio de pastillas o inyecciones, dispositivos intrauterinos o condones, hasta soluciones más permanentes como la ligadura de trompas. Para los hombres por lo general se han centrado en el uso de preservativos, para una medida temporal, o una permanente por medio de la vasectomía. Sin embargo, una opción intermedia como la píldora para los hombres aún no existe, aunque hay varias investigaciones que trabajan en ella.
Por lo que este método puede ser una opción diferente “no quirúrgica, reversible y de bajo costo” refiere Wen-Qing Li responsable de la investigación.
El nuevo método está basado en el hecho ampliamente conocido de que el calor en el tejido testícular mata a los espermatozoides. Para lograr el efecto térmico adecuado ellos utilizaron nanopartículas de oro en forma de barras, que absorben la luz infrarroja y la convierten en calor, algo que actualmente otros investigadores están utilizando para calentar y destruir las células tumorales.
El equipo prevé calentar el tejido testicular a diferentes temperaturas para ciertos efectos. Su intención es que con un fuego lento, las nanopartículas maten a los espermatozoides pero no las células productoras, lo que provoca la anticoncepción reversible debido a que el tratamiento sería preservar la capacidad de producir esperma. Pero con un alto calor, las partículas podrían causar daños permanentes en las células productoras de espermatozoides, el cierre de la producción de esperma, conduciendo a la esterilización.
“En comparación con los métodos hormonales, la técnica tendría pocos efectos secundarios, ya que no se perturban otras vías hormonales en el cuerpo, sería menos invasivo que un procedimiento quirúrgico como la vasectomía. Además de que el método podría aplicarse ya para esterilizar a los animales domésticos con un enfoque futuro para los seres humanos” agrego.
En las pruebas en ratones, los investigadores expuestos los testículos de los animales a una luz infrarroja durante unos 10 minutos con temperaturas de entre 37 y 45 ° C, logrando una infertilidad del 90% en una semana y un 50% hasta los dos meses.
Ser capaz de presumir de tener oro en los testículos puede ser para muchos un aspecto positivo, pero en general suena como que esto puede ser difícil de vender, aunque debido a sus nulos efectos hormonales e intervención quirúrgica puede ser una prometedora técnica futura.
Referencia: CEN