Meses después de que una bola de fuego de unos 19 metros de diámetro apareciera en los cielos de Chelyabinsk, Rusia, los científicos han empezado a manejar datos sobre el fenómeno, su composición, su trayectoria e impacto. Han sido publicados, de hecho, tres artículos, dos en la revista Nature y un tercero en la revista Science, en donde se reconstruye el evento y donde se halla que el superbólido de fuego era mucho más grande de lo esperado. De hecho, se pone en tela de juicio el riesgo que este tipo de meteoritos podría tener en la Tierra.
Los artículos confirman que el meteorito era uno ordinario, de chondrita, el mismo material que la nave espacial japonesa Hayabusa, recuperó del asteroide Itokawa en el 2010. Aparentemente se originó en la familia de asteroides Flora, en el cinturón que hay entre Marte y Júpiter. En el artículo de Science, un grupo de investigadores visitó los pueblos cerca del punto donde se impactó el meteorito y retrazó su trayectoria usando las cámaras que muchos automóviles tienen en Rusia, así como los videos de las cámaras de seguridad, que capturaron el momento del fenómeno, el 15 de febrero del 2013. “Directamente bajo la trayectoria de la bola de fuego, la onda de choque fue lo suficientemente fuerte para que la gente cayera”, escribieron los investigadores.
Algunos números interesantes:
- El meteorito -aparentemente- era originalmente de unos 19 metros, con una masa de 12,000 a 13,000 toneladas. Entró a la atmósfera a una velocidad de unos 64,374 kms/hora.
- La primera onda de choque se formó a 88 kms de altura sobre la superficie.
- 30 kms sobre la superficie, el meteoro tuvo su pico en calor y brillo, lo que lo hizo incluso más brillante que el Sol en un radio de 99 kms.
- La explosión fue igual a 500 mil a 600 mil toneladas de TNT (déjenme dudar de ese dato, pero en fin).
- Un impacto de por lo menos 4 mil millones de años habría creado venas de choque en el asteroide, haciendo que la roca se rompiese más fácilmente.
- Unos 4,500 a 6,500 kilos de meteorito cayeron a la Tierra, incluyendo el fragmento de 750 kilos hallado en el lago Chebakul. Más del 75% de la roca se evaporó.
- El fragmento más grande creó un agujero de unos siete metros de ancho en el hielo que cubría el lago Chebarkul, el cual tenía una capa de más de 60 cms de hielo en ese momento.
La mayor parte de daño de parte de la roca vino del choque con el aire y no de los fragmentos del meteorito golpeando la Tierra. Como se apunta en uno de los artículos de Nature, pareciera que nuestros modelos sobre la onda de choque debidos al aire, basados en los efectos de bombas nucleares de la misma energía, podrían estar sobreestimando lo que realmente ocurrió en este caso, ya que los asteroides se rompen en la medida que van cayendo. Y si quieren malas noticias, los investigadores estiman que el riesgo de que asteroides como el de Chelyabinsk golpeén la Tierra podrían ser 10 veces más grandes de lo que se pensaba antes.
Referencias: