Investigadores de IBM y de la Columbia University han desarrollado un programa de análisis del habla para diagnosticar posibles casos psicosis. Una patología caracterizada por pérdida del pensamiento coherente y falta de percepción de la realidad.
La psicosis es un término genérico utilizado en psiquiatría y psicología para referirse a un estado mental descrito como una escisión o pérdida de contacto con la realidad. Alrededor del 1% de la población entre las edades de 14 y 27 años es considerado como de alto riesgo clínico de psicosis.
Las personas que experimentan psicosis pueden presentar alucinaciones o delirios y pueden exhibir cambios en su personalidad y pensamiento desorganizado. Estos síntomas pueden ser acompañados por un comportamiento inusual o extraño, así como por dificultad para interactuar socialmente e incapacidad para llevar a cabo actividades de la vida diaria.
Para el desarrollo del programa los científicos de IBM y Columbia se unieron para crear una base de patrones establecidos y frases sin sentido de cuando una persona habla de forma prolongada.
Las pruebas se realizaron en 34 sujetos, la mayoría de ellos fueron varones donde se les pidió que narraran de forma indefinida sus experiencias subjetivas, siendo su discurso transcrito y analizado por la computadora en relación a sus patrones de expresión, incluyendo la semántica (significado) y la sintaxis (estructura).
El análisis estableció la coherencia semántica de cada paciente (lo bien que él o ella desarrolló en el tema), y la estructura sintáctica, como la longitud de las frases y el uso de palabras determinantes que enlazan las frases.
“Un psiquiatra clínico puede reconocer intuitivamente los síntomas de pensamientos desorganizados en una entrevista tradicional, pero la maquina puede aumentar lo que se escucha al medir con precisión las variables”, refieren los desarrolladores.
“Los método actuales de detección tienen un rango de eficacia del 70%. En las pruebas realizadas, el software fue capaz de tener una efectividad del 100% en su detección”.
Sin duda un avance esperanzador, no solo para pacientes que pudiesen sufrir el trastorno, sino para la psiquiatría en general, pues una crítica frecuente de esta especialidad es la antigüedad y dudosa validez de algunos de sus instrumentos, trabajos como el de estos investigadores son un puente de conexión entre la informática y la psique.
Ahora los investigadores esperan ir más allá y en futuros trabajos abordar otros trastornos como la depresión, el trastorno obsesivo compulsivo o el autismo.
Referencia: Nature