Grace Hopper siempre será recordada por su rol en el desarrollo del lenguaje de programación Cobol (que incluso hoy en día se usa popularmente en bancos y empresas mayores), además de haber sido quien inventó el término «bug» (error) cuando halló una palomilla en un panel de una computadora, que causaba errores en el sistema.
Hopper tuvo una larga e interesante carrera. Cabe decir que empezó en un tema que era casi dominio exclusivo de los hombres. Hopper estudió matemáticas en el Colegio Vasser. Obtuvo su doctorado en Yale, pero como mujer parecía tener limitaciones para su desarrollo profesional.
Aparentemente su única opción era enseñar matemáticas. De acuerdo con esto, la doctora regresó a Vasser y empezó a trabajar en la enseñanza, primero como instructora y después como asistente de profesor. Sin embargo, llegó al Segunda Guerra Mundial y Hopper se unió a la Reserva de la Marina estadounidense. Entonces trabajó en la máquina Mark I, como jefe de programación, en donde el director era Howard H. Aiken.
Al final de la guerra, Hopper quiso entrar en la Marina, pero su petición se rechazó por su edad (38 años). Sin embargo, continuó sirviendo en la reserva de la Marina. Se retiró en 1966 pero se le llamó al servicio activo en agosto de 1967, para una tarea de seis meses que se convirtió en una tarea sin fecha límite de tiempo.
Trabajó en COBOL de 1967 a 1977 y fue directora del Grupo de Lenguajes de Programación de la Marina. Cuando se retiró finalmente en 1986, ya era la comisionada de la Marina estadounidense más longeva y retuvo su rango de Almirante.
Este video muestra un resumen de su larga carrera:
Parte del legado de Grace Hopper fue el inspirar el interés en carreras científicas e investigación, a mujeres. También trabajó intensivamente en educación y fue partícipe en proyectos educativos durante la mayor parte de su vida.