Para crear su cerveza “anti-cruda”, los australianos tomaron una común y la modificaron para convertirla en algo así como un Powerade para los amantes de la bebida. Los científicos simplemente le agregaron electrolitos a la cerveza y comenzaron su experimento, que consistió en hacer una prueba con siete hombres voluntarios que hicieron ejercicio hasta deshidratarse lo suficiente. Los participantes tuvieron que beber cuatro cervezas: dos light y dos fuertes, una de cada variedad con electrolitos agregados.
Los voluntarios tuvieron que beber el 150% de lo perdido durante el ejercio en menos de una hora y al final, los resultados dieron a conocer que la cerveza light con electrolitos fue la más hidratante. Aunque es claro que para mejorar el rendimiento y evitar la deshidratación hay que sacrificar un porcentaje del alcohol –pues las cervezas light tienen menos grados que las normales– las conclusiones del proyecto aclaran que la “cerveza anti-cruda” es un tercio más efectiva que su contraparte en cuanto a hidratar a una persona.
Referencia: National Center for Biotechonolgy Information, News Medical