Tres científicos nacidos en los Estados Unidos, Jeffrey Hall, Michael Rosbash y Michael Young, recibieron el Premio Nobel 2017 en Medicina (o Fisiología), por sus descubrimientos sobre los mecanismos moleculares que controlan nuestros relojes biológicos.
Estos mecanismos ayudan a explicar -entre otras cosas- ¿por qué las personas que viajan largas distancias sufren frecuentemente de jet lag, además de las implicaciones para la salud, como el incremento en el riesgo de ciertas enfermedades.
“Los descubrimientos de los científicos explica cómo las plantas, animales y los seres humanos adaptan sus ritmos biológicos que se sincronizan con las revoluciones de la Tierra”, dice la Academia sueca sobre los galardonados.
En el trabajo de los ahora premiados, se usó la mosca de la fruta para aislar un gen que controla el ritmo biológico diario y mostró cómo este gen codifica una proteína que se acumula en la célula durante la noche y se degrada durante el día.
“El reloj [biológico] regula las funciones críticas tales como el comportamiento, los niveles hormonales, el sueño, la temperatura del cuerpo y el metabolismo”, dice la Academia sueca sobre el trabajo de los científicos galardonados este año, que recibirán 1.1 millones de dólares.
Thomas Perlmann, secretario del Cinité Nobel de instituto Karolinska, describió la reacción de Rosbach cuando se le informó del premio: “dejó de hablar y entonces dijo: és una broma'”. El Premio Nobel de Medicina es el primero que se da cada año. Estos premios, creados por Alfred Nobel, se han convertido en quizás, el reconocimiento más importante para cualquier persona en el planeta. Los premios se dan para ciencias y literatura, además del Premio Nobel de la Paz. La primera vez que se otorgaron fue en 1901.