Debido a la buena respuesta al post de ¿Cual seria la mejor resolución de pantalla para el ojo humano?, en esta ocasión nos dimos a la tarea de investigar cuales serian los mejores audífonos para nuestros oídos. Pero a diferencia de la vista en el oído intervienen más elementos haciendolo un poco más complejo, por lo que enlistaremos las principales características que debes tomar en cuanta a la hora de adquirir unos audífonos.
Primero que nada debemos fijarnos en las características del equipo, cualquier par de audífonos que se jacten de serlo deben incluir en su empaque información sobre las especificaciones del equipo. Ejemplo:
Frecuencia de respuesta
La Frecuencia de Respuesta se describe como un rango que se mide en Hercios (Hz). El oído humano puede percibir generalmente rangos desde 20 a 20 000 Hz, fuera de esos rangos la diferencia en la practica es casi inapreciable para la población en general, aunque existen frecuencias bajas que aunque no se escuchen pueden sentirse.
Este es un parámetro de los que podemos despreocuparnos un poco ya que en cuanto a lo que se refiere estrictamente al sonido hasta los audífonos chinos que nos venden en la banqueta cuentan con esta frecuencia, pero cabe mencionar que mientras más amplio sea el rango de frecuencia mejor será su respuesta para reproducir frecuencias graves o altas a tal grado que podamos experimentar alguna sensación física.
Actualmente los audífonos de gama alta se pueden encontrar hasta con rangos de 2 a 30,000 Hz. Pero el problema de trasmitir estas frecuencias es que la mayoría de los auriculares utilizan el mismo transductor (la parte que vibra para producir el sonido) tanto para bajos como altos, lo que se traduce en un sonido más pobre. Esto es principalmente por el tamaño reducido del auricular, pero los de mayor calidad tratan de solucionar esto aumentando el tamaño de transductor o adicionando varios transductores para el tweeter, woofer y subwoofer.
Sensibilidad
Está se refiere a la potencia de salida, es decir cuan fuerte se escucha. Esta se mide en decibeles (dB). Para nuestro oído esta recomendado como máximo 100 dB, ya que más alto podría hacernos perder progresivamente el oído. Aunque si ya eres medio sordo puede que te convenga unos por arriba de los 100 dB.
Para que se den una idea una conversación normal va desde los 60 a 70 dB. El sonido de un restaurante lleno de gente es 85 dB. El ladrido de un perro 100 dB. Una motosierra, 110 dB. El sonido de un avión despegando 140 dB lo cual podría dejarte sordo por un tiempo. Como regla, a partir de los 125 dB ya se empieza a sentir dolor, por lo que hay que tener en cuenta que los daños a tus oídos son irreversibles. Si quieres saber más sobre el daño a tus oídos y como prevenirlo te recomendamos el post ¿Sabias por que tus oídos mueren lentamente?
Impedancia
La impedancia es la resistencia al paso de una corriente eléctrica. Esta se mide en Ohmios (Ω). Y en lo que se refiere al audio mientras menor sea la impedancia, mayor es el volumen de los mismos pero cabe aclarar que con un mayor volumen no necesariamente aumenta la calidad del sonido. Por ejemplo unos audífonos que tengan un nivel mayor a los 300Ω se escucharán muy bajos en un iPod o dispositivo móvil, ya que requieren más potencia y este tipo de gadgets no la pueden otorgar. Para un óptimo desempeño en estos dispositivos la impedancia correcta debería estar a menos 100Ω, mientras menor sea mejor.
Potencia
La potencia que se requiere en los audífonos se mide en miliwatios (mW), esta es importante ya que la intensidad de nuestros audífonos depende de la potencia suministrada por el reproductor así como de su impedancia.
Por lo que la intensidad del sonido está relacionada con la potencia eléctrica que le llega mediante su sensibilidad (dB). Cuanto más sensible más intenso será el sonido generado. Por ejemplo unos audífonos con especificación de 100 dB a 1mW, significa que por 1 mW de potencia tendremos 100 dB que es una medida de intensidad, pero cabe aclarar que los dB están a una escala logarítmica, por lo que en este caso 2mW no nos darán 200 dB.
Así que resumiendo hay dos factores que nos indican la potencia y que tan alto sonaran nuestros audífonos: sensibilidad e impedancia. Pero para aclara todo esto y todos puedan calcular la intensidad de su equipos usaremos la ley de Ohm (I=V/R), donde I es (intensidad), V (voltios) y R (resistencia).
Ejemplo: Supongamos que tenemos un reproductor con una potencia de salida 7mW a 32 Ω.
Si en vez de unos auriculares de 32 Ω usamos unos de 16 Ω la potencia de salida será ahora de 14mW (P=V^2/R), pero esto no significará que la música sonará el doble de alto.
Ahora supongamos por ejemplo que ambos auriculares tienen una sensibilidad de 114 dB/mW.
- Para los auriculares de 16 Ω (14mw): dB=20xlog(14/1)= 23 por lo que su Intensidad seria (114+23= 137 dB)
- Para los auriculares de 32 Ω (7mw): dB=20xlog(7/1)= 17 por lo que su intensidad seria (114+17=131dB). Comprobando que el incremento en los decibeles es poco.
Forma
La variedad de diseños y materiales en conjunto con las características anteriores les darán a nuestros equipos el rendimiento más optimo para nuestras necesidades. Existen en una enorme cantidad de tamaños y formas, los hay cerrados o abiertos, por si deseamos aislarnos o no del exterior, algunos de los cuales ya cuentan son sistemas de cancelación de sonido, así como inalámbricos o contra agua, todo depende de lo que necesitemos.
También hay los que se introducen dentro del conducto auditivo externo, en esta forma en particular hay que asegurarnos que encajen correctamente en nuestra oreja ya que de esto dependerá la calidad del sonido. Algunas marcas incluyen una variedad de gomas para que puedas adaptarlos al tamaño de tu oído. En cuanto a materiales existen mucha diversidad los cuales irán de la mano con el precio, ya mientras sea mayor su calidad su precio también.
En conclusión, casi todos los audífonos desde más básicos hasta los de gama alta tienen las especificaciones para que nuestros oídos escuchen los sonidos que naturalmente estamos capacitados para procesar sin dañar nuestro preciado sentido. Con las características que enunciamos anteriormente podrán darse cuenta de que las variaciones individuales de cada una de ellas en los equipos son mínimas, lo que realmente hace la diferencia de unos audífonos a otros es el conjunto de todas ellas. Pero ahora ya sabes algunos datos a tomar en cuenta para hacer comparaciones y comprar el más adecuado para ti.