Algunas especies de bacterias y plantas tienen la capacidad de clonarse al reproducirse de forma asexual. En biotecnología, la clonación implica otro proceso: la creación de copias de fragmentos de ADN, células y hasta organismos enteros de forma artificial. La semana pasada escribí acerca de la posible clonación de John Lennon a partir de su hueso y fui al cine a ver Jurassic Park (1993) en 3D. La importancia de esos hechos aparentemente irrelevantes está en que ambas experiencias me llevaron a pensar en las implicaciones que podría tener la clonación en un futuro y si debería ser practicada o sancionada.
Jurassic Park es ciencia ficción, pero la clonación como tal sí existe y está dividida en clonación celular, molecular, reproductiva, natural, terapéutica, de sustitución, de especies extintas y en peligro de extinción, en separación de blastómeras y en gemelación artificial. Cada una involucra procesos distintos y tiene diferentes implicaciones éticas, pero la más relevante para la discusión sobre la legalidad y moralidad de la clonación es la reproductiva, que consiste en la creación de una copia que es genéticamente igual a un humano o animal que ya existe. Después de que distintas especies animales ya hayan sido clonadas así de forma exitosa, se ha hablado mucho sobre los posibles defectos genéticos de los clones.
Un ejemplo de esta situación fue la clonación del primer mamífero, la oveja Dolly, en 1996. Aunque ella parecía estar completamente sana al nacer, murió a los 6 años y algunos comenzaron a especular con la idea de que tal vez Dolly envejecía más rápido de lo normal por ser un clon. En el Roslin Institute donde nació la oveja se hizo una investigación y se determinó que no había ninguna anomalía en la salud de Dolly que indicara que había envejecido antes de tiempo.
Además de Dolly se han clonado muchos otros animales como un ratón soviético llamado Masha en 1986, un gato llamado CopyCat en 2001 y dos lobas llamadas Snuwolf y Snuwolffy en 2005. Entre los planes de clonación para animales extintos o en peligro de extinción están la idea de clonar pandas y el intento por clonar un mamut. Ahora, rescatar a los pandas y otras especies que están desapareciendo por culpa de los humanos no suena nada mal, pero clonar un mamut es algo completamente diferente. Como dice el Dr. Ian Malcolm en Jurassic Park, “tuvieron su oportunidad, y la naturaleza los seleccionó para su extinción”; intentar clonar a una especie que no conocemos podría ser muy peligroso tanto para los humanos como para el ecosistema y el balance natural de la vida. (Aunque bueno, los humanos no respetan mucho esas dos cosas de cualquier forma)
Otro tipo de clonación que vale la pena discutir es la terapéutica, que se trata básicamente de generar embriones y de ahí tomar las células madre necesarias para crear órganos y tejidos que puedan trasplantarse. Con un buen control, este tipo de clonación podría salvar a muchas personas, pero si no es debidamente monitoreada, fácilmente podría convertirse en clonación reproductiva. Si eso pasara, la situación se podría comparar a lo que sucede en el libro de Never Let Me Go: el clon terminaría siendo una propiedad más que una persona. Una medida que se ha considerado para que esto no suceda es insertar los órganos en cerdos y vacas y luego trasplantarlos a los humanos cuando los necesiten, pero ahí también hay implicaciones éticas sobre los derechos de los animales.
Alrededor de la clonación humana hay mucha controversia y ya que muchos gobiernos e instituciones religiosas están en contra de la clonación reproductiva, se ha sugerido que se prohíba hasta que se resuelvan las posibles implicaciones de seguridad. Ya se han creado embriones e híbridos humanos en 1998 y 2008, pero han sido destruidos antes de que puedan crecer debido a los posibles dilemas éticos que podrían surgir si se desarrollan.
Como ya se explicó, las ventajas de la clonación están en que muchas especies podrían ser traídas de regreso a la vida después de su extinción y las que por el momento están el peligro podrían dejar de estarlo. Además, la clonación terapéutica de órganos y tejidos sería un avance enorme para la medicina.
Queda claro que la clonación trae muchos beneficios, pero no se puede negar que también trae muchos peligros. Por ejemplo, en caso de que se logre clonar un mamut, no se conocen los efectos que su reaparición en el planeta pueda causar y en caso de que algún día se clone un humano, ¿cómo otorgarle derechos y un estatus de igualdad ante la sociedad?
El verdadero conflicto que surge a partir de los avances en la clonación aparece porque aunque podrían lograrse cosas grandiosas con este conocimiento, también podría ser utilizado para hacer cosas terribles. Aunque la idea en sí suena increíble y es emocionante pensar que podríamos ver un mamut o un John Lennon caminando por el planeta otra vez, creo que la humanidad no está lista para algo así y lo más probable es que no lo esté pronto.
Constantemente escuchamos teorías sobre el fin del mundo con un apocalipsis, pero no muchos se han detenido a considerar que la destrucción de los humanos podría llegar más en la forma de Jurassic Park y Never Let Me Go que en la forma de El día después de mañana y The Walking Dead. ¿Ustedes qué opinan sobre la clonación de humanos y animales?