El gran colisionador de hadrones, que se encuentra en la Organización Europea para la Investigación Nuclear (CERN) en Suiza, es uno de los instrumentos científicos más costosos para la ciencia.
Ahí se investigan las propiedades de las partículas atómicas y subatómicas y para ello se necesitan muchísimas computadoras, pues las colisiones de las partículas elementales se cuentan por miles de millones y de ahí los sistemas de cómputo tienen que discernir cuáles son las colisiones importantes y cuáles deben ser desechadas.
Por muchos años el CERN ha usado herramientas de código abierto y sistemas operativos como Linux (en donde incluso tenían su propia distribución), aunque también en ocasiones usan herramientas comerciales y sistemas operativos propietarios como Windows o Mac OS X.
Aumento en las licencias de Microsoft
De acuerdo con información dada por el propio CERN, Microsoft cambió su esquema de licencias y de ser académicas pasaron a ser empresariales y por ende, los costos en la institución se han elevado diez veces en este rubro.
Esta situación ha obligado a replantear el tema del software en el CERN y se decidió poner en marcha un plan alternativo denominado MAlt (Microsoft Alternatives), en donde se pretende sustituir algunos de los servicios y productos de la empresa de las ventanas por otros de código abierto.
MAlt arrancó hace un año con la finalidad de reducir costos y tener mayor control del software, lo que a la larga tendrá como beneficio el poder administrar y mejorar sus propias herramientas sin necesidad de esperar a que Microsoft haga los cambios correspondientes en sus productos.
Hay que decir que el CERN usa muchísimas computadoras y el esfuerzo de cómputo es enorme, por lo que el cambio de licencias de Microsoft sí altera considerablemente los costos del CERN en este rubro.
De acuerdo con Emmanuel Ormancey, quien dirige los sistemas en el CERN, otras instituciones están pasando por las mismas dificultades y por ello se buscan otras soluciones. Este programa, desde luego, es muy ambicioso y tendrá que ser de largo plazo.
Información compartida
Hay que decir que el CERN tiene un portal de datos abiertos, el cual permite que los experimentos del colisionador se compartan. Esto es extraordinario en el sentido de que cualquier equipo de investigadores tiene acceso a los datos fuera del CERN e incluso puede servir para entrenar y educar a los nuevos físicos.
De hecho, hay muchos equipos que contribuyen al trabajo en el CERN, entre ellos, de físicos mexicanos.
Por otra parte, las tecnologías de software del CERN tienen ya una serie de productos de código abierto, como Invenio, un paquete de administración de contribuciones para institutos de ciencia, o Indico, un paquete para conferencias basado en Invenio, el cual es usado por más de 200 sitios alrededor del mundo.