Investigadores del The Scripps Research Institute y de Janssen Pharmaceuticals se encuentran a un paso de desarrollar una vacuna universal con todas las cepas de la gripe. Una infección de difícil control debido a las numerosas cepas y constante mutación.

Millones de personas desarrollan gripe en todo el mundo cada año. Es por eso, que una vacuna universal ha sido es uno de los grandes retos de los virólogos y de la medicina preventiva. No hay una gripe, sino muchas. El problema es que ésta tiende a mutar con mucha frecuencia, lo que reduce la efectividad de las vacunas existentes.

Actualmente se sabe que el virus muta gracias a dos proteínas que tiene en su superficie: la hemaglutinina (HA) y la neuranimidasa (NA). La estructura molecular varía, por eso diferentes números van acompañando a esas letras, como la conocida gripe A o H1N1.

Las investigaciones han intentado desarrollar una vacuna centrándose en la parte estable de la hemaglutinina y despreciando la parte más variable. La estructura de esta proteína esta formada por una cabeza formada por aminoácidos que van cambiando y un palo (o tallo) con piezas más estables.

En un primer estudio se introdujeron nanobacterias para eliminar la cabeza de la hemaglutinina y fijar su tallo, de tal manera que esta cepa tuviera capacidad como para generar en el cuerpo una reacción defensiva al entrar en contacto con el virus de la gripe pero fuera lo suficientemente neutra como para que esa reacción se dé ante cualquier cepa.

El segundo estudio ha aplicado una combinación de mutaciones para alargar el palo de la hemaglutinina para que él por sí solo sea la estructura funcional de la vacuna. Los investigadores probaron con éxito esta vacuna en ratones a los que le inoculizaron la cepa H1N1 y después la cepa H5N1.

De momento, el nuevo tratamiento ha demostrado eficacia cuando ha sido aplicado en los animales. El siguiente paso de la investigación consiste en probar las vacunas en ensayos clínicos para ver si funcionan adecuadamente en los seres humanos.

Este proceso de ensayos clínicos es muy exhaustivo y en la mayoría de los casos se demora durante varios años, pero lo importante es que, gracias a este descubrimiento, estamos un paso más cerca de conseguir la vacuna universal contra la gripe.

Una vacuna universal evitará que las personas con mayor riesgo padezcan la enfermedad de manera recurrente, además de que permitirá proteger a la población en general de las cepas más peligrosas como las que han contagiado a las aves y los cerdos.

Referencia: Science