Buddy pesa 5 kilos, tiene un sensor de temperatura, cámara, micrófono, bocinas y pantalla touscreen de 8 pulgadas donde muestra su cara amigable y feliz para interactuar con la familia. También tiene Wi-Fi y Bluetooth para conectarse con otros dispositivos y obtener información de la red pero lo importante es la supuesta facilidad que tiene para monitorear la casa, enviar alertas en situaciones raras, telepresencia e incluso ser el camarógrafo y fotógrafo oficial en eventos especiales como cumpleaños. Por otra parte, también podría ser un compañero para gente de la tercera edad y existe una versión para niños con autismo.
Buddy es parte de una campaña de Indiegogo, el sitio que recauda fondos por Internet, y aunque no lo parezca conquistó el corazón de la gente pues sus creadores necesitaban 100 mil dólares para su fabricación y hasta la fecha llevan un poco más del doble. Por supuesto, hay varios precios, el más accesible es de 549 dólares más envío y quien lo compre lo tendrá en su hogar hasta mayo del próximo año.
Claro, aún hay mil temas por definir antes de que estos androides estén en casa: ¿Son familia? ¿Son sirvientes? ¿tiene emociones? ¿sólo ejecutan ordenes? El tiempo lo dirá.
Referencia: Indiegogo