Seguramente muchos de ustedes han sido leales a Black Mirror, una serie de televisión británica creada por Charlie Brooker y producida por Zeppotron. Esta serie ha destacado por su aproximación de la humanidad a la tecnología, mostrando un futuro terrorífico que podría estar a la vuelta de la esquina.
En el episodio final de la tercera temporada, podemos ver que el gobierno afirma que está utilizando drones de insectos para contrarrestar el colapso de la población de abejas, una especie vital para el pleno funcionamiento de la Tierra. Sin embargo, todo resulta ser una falacia, pues en realidad los vehículos autónomos están siendo utilizados para la vigilancia pública y, peor aún, para matar.
Ahora, esto podría convertirse en una realidad, ya que drones similares están llegando a territorios japoneses, pero sin todos esos secretos del gobierno y conspiraciones. Estos drones del tamaño de insectos se convirtieron en polinizadores artificiales con la ayuda de una capa de pelo de caballo y un gel pegajoso de iones.
Con el pelo del equino, el dron puede trabajar como abeja para recoger polen de una flor y sencillamente depositarlo en otra. Los polinizadores artificiales están hechos por un drone de 4 x 4 cm.
El gel iónico fue descubierto accidentalmente por unos investigadores japoneses. Durante el año 2007, el químico Eijiro Miyako se encontraba trabajando en posibles conductores eléctricos líquidos. Un intento de hacerlo produjo un gel pegajoso, parecido a una cera, pero en su momento no tuvo la relevancia pertinente, así que fue archivado y considerado como fracaso.
Después de 10 años, durante una simple limpieza de laboratorio, el gel iónico fue redescubierto permaneciendo sin ningún cambio, algo que generó cierta dosis de incertidumbre y curiosidad al científico.
«Nos sorprendió que después de 8 años, el gel iónico no se degradara conservando su textura viscosa. Los geles convencionales están hechos principalmente de agua y no se pueden usar durante mucho tiempo, por lo que decidimos utilizar este material para la investigación.»
Miyako experimentó las probabilidades de agarre de polen por parte del gel cubriendo a hormigas con él. Después esas hormigas fueron trasladadas a una caja de tulipanes. Los investigadores se dieron cuenta de que las hormigas con gel eran más capaces de recoger polen, que las que no tenían.
Además, otra gran maravilla descubierta por parte del gel, fue que al aplicarlo en algunas moscas domésticas, éste cambió de color cuando se exponía a diferentes cambios de luz, brindando un efecto de camuflaje para ayudar a los polinizadores artificiales a evitar algún tipo de depredador.
Los investigadores japoneses creen que los polinizadores robóticos podrían ser entrenados para aprender caminos de polinización utilizando sistemas de posicionamiento global e inteligencia artificial.
Sin embargo, estos minúsculos drones aún no son autónomos y no han sido probados fuera del laboratorio, pero es un gran avance para la problemática que hay en torno a las abejas. En todo el mundo, su especie ha disminuido drásticamente, posiblemente debido a pesticidas o el cambio climático y, sin ellas, la existencia de la humanidad podría ir en declive.
Referencia: Cell, Eurekalert