Un equipo internacional de científicos ha desarrollado una “nano-máquina” de ADN capaz de detectar y reconocer diferentes anticuerpos en tan solo cinco minutos. Un avance que podría impulsar una rápida detección de enfermedades infecciosas y autoinmunes, como la artritis reumatoide o el sida.
Los anticuerpos son proteínas producidas por el sistema inmunitario del cuerpo cuando detecta sustancias dañinas, llamadas antígenos. Los ejemplos de antígenos abarcan microorganismos (tales como bacterias, hongos, parásitos y virus) y químicos.
Por otra parte los anticuerpos también se pueden producir cuando el sistema inmunitario erróneamente considera el tejido sano como una sustancia dañina. Esto se denomina un trastorno autoinmunitario. Cada tipo de anticuerpo es único y defiende al organismo de un tipo específico de antígeno.
La nano-máquina funciona cuando un anticuerpo se le une provocando un cambio estructural (o conmutador), que genera una señal de luz. Esta detección se produce en solo cinco minutos, lo que permite que los anticuerpos sean detectados fácilmente, incluso en muestras clínicas complejas, como el suero sanguíneo.
“Una de las ventajas de nuestro enfoque es que es muy versátil. Esta nanomáquina ADN puede ser, de hecho, modificada a medida, para que pueda detectar una amplia gama de anticuerpos, esto la hace adaptable a muchas enfermedades diferentes”, dijo Francesco Ricci, autor de la investigación.
Además, “nuestra plataforma modular ofrece ventajas significativas con respecto a los métodos existentes para la detección de anticuerpos”, añade el profesor Vallée-Bélisle, coautor de la investigación. “Es rápida, no requiere reactivos químicos, y puede llegar a ser útil en una gama de diferentes aplicaciones, tales como el diagnóstico y la técnica de bioimagen“.
Otra característica interesante es su bajo costo, los materiales necesarios para una prueba con ella cuestan solo unos 15 centavos de dólar, un precio muy competitivo en comparación con otros métodos, según los desarrolladores del invento.
Ahora los investigadores esperan mejorar la nanomáquina adaptándola para que las señales que emita puedan leerse con un teléfono móvil, para de esta forma darle un acceso a las pruebas podría ser aún más general.
Referencia: Angewandte Chemie, Alphagalileo