Anteriormente ya te hemos informado sobre dispositivos que pretenden cuantificar los niveles de glucosa sin la necesidad de pincharse. Ahora científicos de la Universidad de Leeds se suman ha estas innovaciones al desarrollar un dispositivo que funciona con base en luz infrarroja para medir el azúcar en sangre sin penetrar la piel.
Actualmente, pinchazo de dedo es la rutina diaria de los diabéticos en todo el mundo. Sin embargo, ni el dolor ni el proceso son agradables, y es particularmente difícil para los niños pequeños que no entienden el propósito de todo esto.
La diabetes es un desorden glandular propio del páncreas que no permite procesar los alimentos por falta de insulina. En la diabetes tipo 1, el cuerpo no produce insulina. En la diabetes tipo 2, el tipo más común, el cuerpo no produce o no usa la insulina adecuadamente. Con el tiempo, el exceso de glucosa en la sangre puede causar enfermedades serias como cardíacas, renales, derrames cerebrales e incluso la necesidad de amputar un miembro.
Actualmente la diabetes afecta actualmente a más de 285 millones de personas en el mundo y se espera que alcance los 438 millones en 2030. En México la diabetes fluctúa entre los 6.5 y los 10 millones.
Conocido como GlucoSense, el dispositivo consta de un cristal de silicona capaz de generar una fluorescencia mediante láseres de baja potencia y con ella medir el índice de glucosa en sangre de una manera indolora. El paciente simplemente requiere colocar el dedo en el dispositivo y esperar tan solo 30 segundos para el resultado.
“Es muy similar a los componentes ópticos que utilizan los teléfonos inteligentes, lo que asegura un dispositivo de bajo costo para facilitar la futura promoción. Además, de que seremos capaces de eliminar las engorrosas pruebas de sangre“, dijo José Gin, responsable de la investigación.
El dispositivo ha sido probado en los dos últimos años dentro de un estudio clínico del Leeds Institute of Cardiovascular and Metabolic Medicine del St. James’ Hospital y pese a que aún necesita de más pruebas antes de ser comercializado, los resultados han sido prometedores.
Referencia: Universidad de Leeds