En el marco de las celebración del Día Mundial del Párkinson hoy hemos hecho una recopilación de como la comunidad médica y el sector tecnológico se dan la mano para mejorar la calidad de vida y el control de las personas afectadas por este transtorno neurodegenerativo que conduce con el tiempo a una incapacidad progresiva.
Hace unos días investigadores del MIT desarrollaron un nuevo y ambicioso sistema dedicado a detectar enfermedades psicomotoras como el Parkinson, dependiendo de la forma en la que una persona escribe en el teclado de su computadora.
Según el estudio, todo se basa en la forma en la que un dedo interactúa con una tecla; no en qué tan rápido puedas escribir o qué tan buena (o mala) sea tu mecanografía, sino en el tiempo que dura la acción motora de un simple presionado de una tecla mientras escribimos. Por ello no necesitarán de ninguna aplicación invasiva ni un teclado especial para poder aplicar su sistema.
Prueba de aliento para diagnosticar la Enfermedad de Parkinson
Investigadores de la Universidad de Cambridge y el Instituto de Tecnología de Israel el pasado mes de febrero un novedoso test que permitiría detectar precozmente la Enfermedad de Parkinson a través del aliento.
En esta investigación, el trabajo se centró en la pérdida progresiva de células nerviosas del cerebro y en la huella química que deja en el organismo para desarrollar el test de diagnóstico. Para ello, buscaron biomarcadores en sangre, líquido encefalorraquídeo y aliento exhalado, donde han encontrado algunos compuestos orgánicos volátiles (COV) que alertan del deterioro cerebral que se está produciendo.
En su primer ensayo clínico realizado en Israel a 57 personas, el test permitió identificar a aquellos que habían desarrollado la enfermedad e incluso distinguir entre diferentes subtipos, en función de la presencia y cantidad de los diferentes compuestos orgánicos.
Láser como una posible cura para enfermedades como Alzheimer y Parkinson
En la Universidad Tecnológica de Chalmers en Suecia se realizó un descubrimiento que podría conducir a la curación de enfermedades como el Alzheimer, el Parkinson y la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob (la llamada enfermedad de las vacas locas) a través del uso de láseres.
Los investigadores descubrieron que es posible distinguir las agrupaciones de las proteínas que causan las enfermedades, a partir de las proteínas de las que funcionan bien en el cuerpo mediante el uso de la técnica láser de fotones múltiples .
Si se eliminan los agregados de estas proteínas desde un principio, estas enfermedades podrían ser curables. El problema hasta ahora ha sido la de detectar y eliminar los estos agregados, pero los investigadores ahora albergan grandes esperanzas de que esta nueva técnica se pueda utilizar para eliminar las proteínas defectuosas.
Cuchara estabilizadora para quienes sufren de Parkinson
Uno de los síntomas de esta terrible enfermedad se refleja en el temblor de las manos y por ende, muchos enfermos no pueden siquiera alimentarse por ellos mismos. Por ello, una compañía llamad Liftware ha desarrollado una cuchara muy particular llamada “Lift Spoon”, la cual tiene un microcontrolador, sensores y pequeñísimos motores capaces de estabilizar los tremores de hasta unos 5 cms, lo que significa la cancelación de casi el 70% de los temblores que sufren las personas con esta patología.
Diagnóstico de Alzheimer y Parkinson en piel humana
Expertos mexicanos de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí descubrieron una forma de detección cutánea en humanos de las enfermedades neurodegenerativas de Alzheimer y Parkinson, un hallazgo que de confirmarse, permitirá conocer en profundidad dichos padecimientos sin cura.
Hasta el momento, las proteínas «anormales», como la alfa-sinucleína en Parkinson y la tau en Alzheimer, se habían detectado en el cerebro de personas fallecidas o en tejidos nerviosos, no cultivables en laboratorio.
El hallazgo permitió detectar las enfermedades con un «trozo de piel» de humanos vivos y estudiar y reproducir sus células a posteriori. «Si logramos que la piel sea un espejo del cerebro, podremos observar la progresión y eficacia de los tratamientos», refirieron los investigadores.
Para el paciente, el procedimiento es «prácticamente indoloro», pues con anestesia local se toman cuatro milímetros de diámetro de piel para su análisis en laboratorio.