Las pruebas de este sistema se han hecho hasta ahora en el Nissan Leaf, vehículo de producción con el que la empresa nipona realizó su primer despliegue de tecnología en automovilismo eléctrico hacia una gran cantidad de países.
Nissan estableció su primera meta tecnológica para finales de la década pasada: lograr tener un automóvil eléctrico comercial. Ahora, la compañía pretende tener para 2020 la infraestructura completa para que los vehículos autónomos sean una realidad lucrativa de amplio alcance.
Volviendo al presente, el automóvil en la prueba – que puede detectar a otros autos, peatones e incorporarse al tráfico a diferentes velocidades – fue puesto en una avenida principal, completó un recorrido y tomó una salida sin problema alguno.
Al ingresar a la autopista se llevaba una velocidad de 40 km/h, mientras que en la vía principal se alcanzó un tope de 80 km/h. Como se puede observar, el auto estaba tripulado, pero ninguno de los ocupantes manipuló el volante o cualquier otro elemento del mismo.
La misión de Nissan parece bastante ambiciosa, sin embargo, no es la única en estar invirtiendo en este tipo de tecnología. Es probable que para finales de esta década haya más vehículos de este tipo circulando por las calles de Japón y otros países.
Referencia: Nissan